El navegador que es capaz de entender el acento catalán

La riqueza de un país tiene mucho que ver con su diversidad. Incluso dentro del mismo idioma reconocemos diferentes acentos regionales y así puede tener su miga entender a un andaluz con su gracejo o a un gallego cerrado. Incluso los acentos más asépticos resultan llamativos para quienes no los pronuncian, así que esa variedad sirve para recalcar al carácter propio de cada autonomía, todos dentro de la realidad común de un mismo lenguaje.

Como la ciencia adelanta que es una barbaridad, incluso las máquinas son ya capaces de adaptarse a las particularidades idiomáticas. Es el caso de la tecnología activada por voz SYNC que Ford monta en muchos de sus vehículos y que es capaz de identificar e interpretar diferentes acentos de diecisiete idiomas, desde el inglés al chino mandarín, pasando por el francés, el alemán, el árabe y, por supuesto, el castellano. En colaboración con los especialistas de Nuance Communications, el sistema puede aprender la tonalidad de voz del conductor y obedecer a órdenes relativas a la reproducción de música, la configuración del navegador o las llamadas telefónicas manos libres.

Ford considera que el acento de cada usuario es “factor clave en su personalidad”, por lo que su sistema de identificación cuenta con un diccionario que incluye pronunciaciones diferentes de las palabras del mismo idioma, recopiladas mediante la grabación de voces de millones de usuarios en el mundo entero, en diferentes zonas de cada país, de los más distintos ámbitos y de edades variadas. De este modo, el dispositivo SYNC puede interpretar los matices de las ‘CH’ en los diferentes estados alemanes o el ceceo típico de algunas zonas de España, además de las tonalidades propias de comunidades como la catalana o la vasca.

El sistema SYNC ha ido evolucionando desde su lanzamiento en 2012 y se ha montado en más de doce millones de vehículos Ford en todo el mundo. Así que, ya sabemos, sin problemas: ‘Ozú, vamonó pa Caí…”.