Infiniti ya enseñó algo en el Salón de Pekín con el QX Sport Inspiration Concept y en el Salón de Detroit el Infiniti QX50 Concept va un paso más allá: sirve para mostrar como será (muy aproximadamente) el próximo SUV medio de producción de Infiniti.
Perfectamente reconocible como un miembro más de la familia, su estética evoluciona la imagen conocida en otros modelos de la marca. La característica parrilla se combina con unos pilotos afilados, un musculoso capó y una protección inferior de aluminio muy voluminosa. Lo mismo ocurre con la forma de las ventanas laterales, con un marco cromado y que en definen en el pilar C la silueta del alerón. En la zaga destaca el enorme difusor, que aloja dos salidas de escape dobles.
Las novedades se centran en el apartado mecánico y tecnológico. Así, bajo el capó se encuentra un motor VC-Turbo, un bloque cuya relación de compresión varía entre un ratio 8:1 y 14:1 en función de la demanda, ofreciendo rendimiento a la par que un funcionamiento más eficiente. En el prototipo desarrolla 272 CV y 390 Nm de par.
En cuanto a la tecnología, Infiniti no es ajena la conducción autónoma, pero está enfocando sus esfuerzos a desarrollar sistemas que actúen como una suerte de copiloto en vez de para sustituir al piloto. El paquete que incorpora el Infiniti QX50 Concept incluye, entre otros, el mantenimiento de carril, alertas de colisión, mantenimiento de distancias con otros vehículos, control activo de trazada…
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