Vaya por delante que ‘El mundo sobre dos ruedas. Historias de BMW Motorrad España’ es un libro para los que siguen (seguimos) disfrutando de la lectura en papel. Porque en realidad se trata de una recopilación de entrevistas que José María Alegre, su autor, ha venido realizando durante años en el boletín electrónico de noticias de BMW Motorrad España. Es decir, que los incondicionales de lo digital y también los que consideran que los contenidos deben ser gratuitos, aún a costa de cercenar el trabajo de los creadores, pueden acceder a ellos a través de la web de la marca alemana.
Se ahorrarían así los 15 euros que cuesta el libro (disponible en los concesionarios de BMW de toda España y a través del correcto electrónico edicionesenmarcha@quintamarcha.com, con 5 euros añadidos por gastos de envío), pero se perderían buena parte del encanto de la obra. Para empezar, se privarían de la selección de los 40 personajes que el autor ha realizado para acercarnos a los más destacados, peculiares o interesantes, junto con el formato en el que ha decidido presentarlos: historias de superación, embajadores de la marca, viajeros anónimos o incluso famosos que revelan su pasión por la motocicleta.
Desde el padre Ángel a Gelete Nieto, pasando por Cayetana Guillén Cuervo, DJ Nano, Gustavo Cuervo, Alex O’Dogherty, el legendario Ted Simon o nuestro colaborador y viajero de moda Charly Sinewan. Y tampoco disfrutarían del prólogo realizado por todo un maestro del periodismo deportivo como es Valentín Requena, durante tantos años la voz de los grandes premios de motociclismo en TVE.
El formato de entrevista me resulta especialmente acertado y atractivo de consumir, con lo cual sus páginas han pasado por mis ojos en apenas tres o cuatro días. La lectura es sencilla, con un estilo claramente digital, con la frescura de la inmediatez aunque quizá sin el reposo de unos textos más algo más pausados. Diría que en un libro de este enfoque la brillantez del estilo pasa a un segundo plano, lo importante es descubrir y saborear personajes que representan una inspiración evidente para todos aquéllos a quienes les ronda en la cabeza coger su moto y lanzarse a recorrer lugares evocadores que a todos nos entusiasman.
La recopilación de Alegre es ante todo un muestrario de pasión y también de voluntad. Pasión por la moto y los viajes; voluntad por querer satisfacer las ambiciones que cada uno se proponga. Quería evitar caer en el tópico cansino del querer es poder, pero lo cierto es que en sus páginas encontramos multitud de ejemplos que así lo refrendan. Hay muchos tipos de viajes y viajeros, de proyectos e intenciones, tanto como personas que toman la decisión de afrontarlos sin necesidad de sentirse excepcionales o disfrutar de privilegios (laborales, económicos o familiares) que están sólo al alcancen de unos cuantos.
En el libro hay historias motivadoras, otras conmovedoras e incluso alguna indiferente (al menos bajo mi punto de vista). No pretendo, faltaría, privar al lector del placer de descubrirlas por sí mismo, sólo anticipo que los entrevistados, en su mayoría, tienen mucho que contar y el autor es capaz de exprimir la esencia de los protagonistas, siempre en un tono amable como cabe esperar de una obra destinada al entretenimiento y no a la polémica.
Se habla, ya digo, mucho de motos BMW y de viajes en ellas, lo que no quiere decir que el mensaje se reduzca a esto. Entre líneas se entrevén otros argumentos que enriquecen los desafíos que los protagonistas se marcan en el momento de meter primera y arrancar, algunos de ellos ejemplarizantes para cualquiera que haya tenido en alguna ocasión el mismo deseo.
‘El mundo sobre dos ruedas’ de José María Alegre me parece un libro recomendable en un género, el de lo viajes en moto, saturado de panfletillos sin trascendencia e ininteligibles por su calidad e incluso ortografía en bastantes casos. El autor ha sumado a la recopilación unas cuentas páginas a modo de presentación de cada categoría de entrevistados, quizá no hubieran estado de más otras aportaciones que añadieran valor a la obra respecto a lo publicado en el boletín electrónico de BMW. En todo caso, el placer de tener un volumen entre las manos, el tacto del papel y el olor de la tinta bien merecen la pena en sí mismos para dejar de mirar durante unas horas una pantalla de ordenador…
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