Estaba dándole vueltas a un tema para publicar mi último post de este año ya agonizante (en unos días disfrutaré de unas pequeñas vacaciones para coger aire de cara al seguimiento intenso del Dakar que haremos en el AS) y no se me ha ocurrido nada mejor que dedicar unas líneas a lo más oportuno que toca en estos momentos: daros las gracias. Este modesto espacio dentro de una web tan extensa como la de un diario deportivo carecería de sentido alguno si vosotros no estuvierais al otro lado para atender a mis pequeños desvaríos. Y la verdad es que debo sentirme muy feliz del apoyo que me habéis brindado, las estadísticas de la audiencia de ‘El retrovisor’ superan con mucho mis expectativas más optimistas, considerando siempre que se trata de una información tan especializada y concreta, muy de nicho como se dice ahora…
Ha sido un 2014 intenso para mí y espero que al menos entretenido para quienes me habéis acompañado en este periplo. Viajamos a Marruecos, dimos la vuelta a España en Harley-Davidson, estuvimos en San Sebastián para el estreno de la secuela de ‘One Any Sunday’, hemos hablado de tecnología automovilística, de los pecados capitales de los periodistas y también de los conductores españoles, os presenté a algunos personajes irrepetibles para mí, compartimos lecturas como ‘En busca del norte’…. En fin, contenidos que he intentado fueran variados pero también interesantes, siempre bajo el prisma de mi percepción personal del asunto (no siempre acertada, seguro) y con el objetivo de compartir con vosotros mis experiencias, sensaciones y opiniones. Y cuando ha sido posible, ofreciendo datos de utilidad o didácticos para que la visita a este blog pudiera dejar algún poso entre quienes me han obsequiado con su atención.
No sé si habré conseguido mi objetivo, sólo aseguro que lo he intentado hasta donde daba mi capacidad y conocimiento. Y también me comprometo a seguir haciendo el año que viene, que afronto con otros proyectos que me ayudan a hacer la monotonía cotidiana (esto del periodismo es a menudo menos emocionante de lo que algunos piensan) del mejor modo posible. Si la providencia lo permite volveré a África, haré ese gran viaje en Harley por Europa que llevo tiempo anhelando, me convertiré en alumno de algunas escuelas de conducción, seguiré acercándoos amigos extraordinarios, estaremos atentos a la evolución del sector del automóvil y la motocicleta, aspiraré a ser honesto y ecuánime en mis valoraciones, descubriré nuevos lugares inéditos para mí de este maravilloso país que es España y, en definitiva, me las ingeniaré para que en la medida de lo posible pasar por este espacio siga teniendo, al menos, el mismo interés que hasta ahora.
Muchos buenos deseos, como veis, para el nuevo año pero uno por encima de todos: que para vosotros 2015 llegue tan cargado de prosperidad y felicidad como deseáis y seguro merecéis. Espero seguir disfrutando de la satisfacción de encontrarnos por aquí. Será una estupenda señal de que las cosas van bien…
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram