Llega el 4008, la propuesta de Peugeot para competir con los Ford Kuga, VW Tiguan y otros todoterrenos de tamaño medio, la categoría que mejor está soportando la crisis en Europa: ha pasado de 340.000 unidades en 2001 a 1.150.000 unidades el año pasado.
El modelo francés era el último rival que faltaba por llegar tras el lanzamiento de sus hermanos, los Mitsubishi ASX y Citroën C4 Aircross. Todos los fabrica en Japón la marca oriental y en realidad son un mismo modelo, porque comparten chasis y mecánica, aunque añaden la personalización estética de cada marca. Sin embargo, en el caso del Peugeot y el Citroën, incorporan también otras mejoras mecánicas y de acabado que refuerzan su calidad. Y el Peugeot es el que tiene un precio de acceso más elevado, 31.900 euros, porque solo se vende con un motor 1.8 HDi de 150 CV y en el acabado Allure, que incluye un equipo de serie más completo y sofisticado.
Al contrario que otros modelos trillizos, el Peugeot 4008, al igual que el C4 Aircross, presentan más cambios de los habituales frente al original, el Mitsubishi ASX. Los más destacados saltan a la vista, porque la marca francesa no se ha limitado a cambiar la parrilla, faros y pilotos, como suele ser costumbre en estos casos, sino que ha rediseñado todo el frontal, desde el capó delantero a las aletas, los parachoques y el portón posterior. Y el resultado es un todoterreno de aspecto diferente y más sofisticado que tiene presencia y mantiene el aire de familia de Peugeot. Por lo demás, mide 4,34 metros de largo, lo mismo que el Audi Q3 y unos 30 centímetros menos que el Peugeot 5007, el anterior todoterreno grande de Peugeot, que se dejó de importar antes del verano.
El interior también está más cuidado que en el modelo japonés, con plásticos de mayor calidad, nuevo volante y otros detalles que crean un ambiente más elegante y refinado. Y los retoques afectan también a la insonorización, que mejora el aislamiento interior, y a los reglajes de suspensiones, que otorgan un buen compromiso entre estabilidad y confort para afrontar los viajes. Así, el 4008 se postula como un todoterreno medio a la última que destaca por su buena presencia, tanto por fuera como por dentro, y ofrece un tacto sólido y una calidad de rodadura notable que se aprecia tanto dentro como fuera del asfalto.
En el aspecto mecánico, el nuevo 4×4 francés tiene como objetivo completar la gama de Peugeot y al contrario que su hermano el Citroën C4 Aircross, se venderá en versión única con un equipo de serie muy completo para no competir con el 3008, un modelo mestizo a medio camino entre monovolumen y todoterreno que la marca vende con precios más asequibles. Así, el 4008 cuenta con un motor 1.8 turbodiésel de 150 CV con sistema Start&stop, que a pesar de llevar las siglas HDi, es de origen Mitsubishi, aunque ha recibido algunos retoques para optimizar su respuesta a bajo régimen. El conjunto se completa con un cambio manual de seis velocidades y la tracción 4×4, la única disponible. Con esta mecánica, alcanza 198 km/h, acelera de 0a 100 km/h en 11,3 segundos y anuncia un consumo medio de 5,6 litros que equivale a 147 g/km de CO2.
El 4008 se vende solo en el acabado Allure, uno de los más completos de la marca y aparte de los dispositivos de seguridad -seis airbags, ABS y control de estabilidad ESP- añade tracción 4×4, climatizador, tapicería mixta de cuero y tela, acceso y arranque manos libres, control de velocidad de crucero, llantas de 18 pulgadas, faros de xenón, radio CD/MP3, bluetooth y otros detalles.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram