A lo largo de esta semana y hasta el próximo 9 de junio, los patinetes eléctricos van a estar especialmente vigilados por la Policía Local de Málaga. Las sanciones están entre los 100 y los 200 euros, aunque pueden llegar hasta los 500 euros.
Una nueva campaña de control va a asegurarse de que estos vehículos de movilidad personal cumplan con las normas que regulan su uso, especialmente con la velocidad. Para cumplir con este objetivo, los agentes van a colocarse en los puntos de la ciudad con mayor tráfico de patinetes eléctricos equipados con radares móviles.
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Estos cinemómetros están regulados y ajustados a la velocidad máxima a la que los patinetes eléctricos pueden circular. Aunque la Dirección General de Tráfico estableció en su momento la velocidad que podían alcanzar estos VMP, cada ciudad puede estipular diferentes límites en sus ordenanzas municipales.
Además de la velocidad, los agentes malagueños van a controlar también el uso del casco en los casos estipulados en la ordenanza municipal y el certificado de circulación, así como que el VMP cumpla con los requisitos establecidos por la DGT. Tal y como se anunció, los responsables de pagar las multas serán los conductores del patinete, independientemente de que este sea de uso privado o de alquiler.
¿A qué velocidad deben circular los patinetes el Málaga?
Los patinetes eléctricos no pueden superar una velocidad de circulación de 25 km/h en todo el territorio español. La normativa de la DGT establece esta limitación dentro de las especificaciones técnicas que deben cumplir estos VMP.
La ordenanza municipal de Málaga, en este caso, regula que esta velocidad será la adecuada para circular por carriles bici y similares, cuando transcurran por la calzada. Si estos se encuentran en una calle peatonal, la velocidad deberá ser de máximo 15 km/h. Cuando circulen por calles residenciales o de plataforma única, podrán circular a 20 km/h.
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Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza, su primer contacto con el mundo del motor fue en los mundiales de MotoGP y Superbikes. Dio el salto al periodismo de motor hace cinco años y, desde entonces, sigue todo lo que tenga ruedas, especialmente si es made in Italy.