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Smart – Range Rover
Posiblemente la mezcla más peculiar, y es que en el pequeño urbanita, con sus reducidas dimensiones, introducir elementos de modelos mayores siempre destaca. La característica parrilla del Range Rover le da mucha presencia. También se ha optado por una configuración con techo tipo targa. Vía Budget Direct. -
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Volkswagen – Ford
Una de las combinaciones más acertadas de la lista. La mezcla de rasgos del Beetle, como sus redondeados y abultados pasos de rueda, con el frontal y el alerón del Focus RS quedan francamente bien. Vía Budget Direct. -
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Dodge – Chevrolet
Ambas marcas americanas son enemigas directas, pero si colaborasen el resultado sería algo así. Partiendo de un Dodge Charger, lo cierto es que la incorporación del frontal de un Chevrolet Camaro hace que el conjunto sea un tanto peculiar. Vía Budget Direct. -
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BMW-Lamborghini
Para estar a la altura de la deportividad de la marca italiana, se ha optado por la base del i8, algo que se deja ver en la parrilla y los pasos de rueda traseros, mezclados con la baja silueta y el largo capó de un Lamborghini. Vía Budget Direct. -
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Nissan – Porsche
El 911 es un modelo atemporal y para muchos será un sacrilegio modificar su imagen. Sin embargo, aunque los rasgos del Nissan GT-R sean muy diferentes, sus pilotos delanteros se adaptan muy bien a su silueta y la parrilla desentona menos de lo esperado. Vía Budget Direct. -
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Bentley – Ferrari
Bentley no tiene un deportivo de pura cepa en su gama, pero el Continental GT es lo que más se acerca, lo que lo convierte en el candidato ideal para combinarse con el Ferrari 812 Superfast. Vía Budget Direct. -
¿Y si las marcas se aliaran para crear coches imposibles?
Así serían los modelos resultantes de firmas tan dispares como Smart y Land Rover o BMW y Lamborghini, entre otras.
