Kode 0, una bestia inspirada en los años setenta

Ken Okuyama ha tomado la base de un Lamborghini Aventador para crear un exclusivo deportivo del que solo se fabricarán cinco ejemplares.

Kode 0

El Lamborghini Aventador adopta formas mucho más rectilíneas.

Ken Okuyama es un nombre conocido dentro del mundo de la automoción, y no es para menos: de las manos de este diseñador han salido modelos tan reconocibles como el Ferrari Enzo. Sin embargo, hace tiempo que optó por crear sus propios coches. El primero fue el Kode 57, que adquirió Floyd Mayweather, y su continuación recibe el nombre de Kode 0.

En principio rumoreado como one-off, es decir, como una unidad única, finalmente se producirá en una exclusiva tirada de solo cinco unidades cuyo precio ya se conoce: 1,5 millones de dólares… a los que hay que sumar el coste del Lamborghini Aventador que se esconde bajo su piel. En total, alrededor de dos millones de dólares (1.700.000 euros, más o menos).

El diseñador pensó en la marca italiana para la base de su creación y no podía haber elegido mejor, puesto que provee una base mecánica que no hace falta tocar lo más mínimo: un bloque 6.5 V12 atmosférico de 700 CV y 690 CV asociado a una caja de cambios de siete velocidades. Al Aventador le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos, pero es posible que el Kode 0 sea todavía más rápido.

¿Cómo es posible? Porque su peso en seco es de 1.550 kilos, lo que significa que es más ligero que el original. Para conseguirlo, tanto el chasis monocasco como la carrocería son completamente de fibra de carbono. Además, su diseño es una clara oda a los deportivos de las década de los setenta, con formas muy angulosas, aristas y una clara silueta en forma de cuña. El propio Okuyama admite que es un tributo a modelos como el Lamborghini Countach y el Lancia Stratos.

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Mario Herráez

Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.

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