Esta es la solución para acabar con el mal olor del aire acondicionado en el coche 

Encender el aire acondicionado es un alivio casi inmediato cada vez que se accede al interior de un vehículo durante los calurosos días del verano. Pero… ¡ay! ¿Qué ocurre cuando, en vez de recibir un soplo de aire fresco, es un olor desagradable el que invade el habitáculo? Este molesto fenómeno es más común de lo que parece, y su explicación, como los remedios, es sencilla. 

Si ya se está lidiando con el problema del mal olor, una posible solución para eliminar la acumulación de bacterias y moho en los conductos del aire es la de recurrir a una espuma limpiadora del evaporador como esta de Errecom que está a la venta en Amazon. Gracias a la sonda con la que viene equipada, el producto se puede aplicar en profundidad, directamente por las rejillas de ventilación y sobre las superficies de los conductos del aire acondicionado. 

Esta espuma limpiadora, apta también para aparatos de aire acondicionado domésticos, purifica el conducto de distribución de aire, incorporando y expulsando todas las partículas contaminantes (polvo, suciedad, alérgenos y microorganismos) que suelen provocar los malos olores.

Se trata de un producto práctico y rápido, capaz de limpiar y purificar el sistema del aire en apenas unos pocos minutos y sin necesidad de aclarado. La espuma, además, acumula más de 1.200 valoraciones en Amazon y una puntuación de 4,4 estrellas sobre 5.

¿Por qué huele mal el aire acondicionado del coche? 

El sistema de aire acondicionado puede convertirse en una fuente de olores desagradables por diversas razones, aunque la causa más frecuente es la acumulación de humedad en el sistema.

Cuando el aire acondicionado funciona, se forma condensación en el evaporador, un componente que enfría el aire antes de enviarlo al interior del coche. La humedad, combinada con el calor del motor, crea un ambiente ideal para la proliferación de bacterias y moho. Estas colonias de microorganismos emiten gases que, al ser expulsados por las rejillas de ventilación, generan ese olor inconfundible y desagradable. 

Es necesario recordar también que, en la medida de lo posible, conviene evitar utilizar el aire acondicionado a máxima potencia ya que, al hacerlo, aumentará la condensación y, con ella, la posibilidad de que se acumule humedad en el sistema. 

Otro factor desencadenante del mal olor puede ser el de la suciedad acumulada en el filtro de partículas del aire acondicionado. Polvo, hojas y otros residuos pueden introducirse en el sistema de ventilación, descomponiéndose con el tiempo y contribuyendo a la formación de malos olores. La falta de uso prolongado del aire acondicionado también puede agravar el problema, ya que el estancamiento del aire en el sistema favorece la proliferación de bacterias. 

Para evitar este inconveniente, la prevención es siempre la mejor estrategia. Utilizar el aire acondicionado regularmente ayuda a mantener el sistema seco y en funcionamiento, impidiendo la acumulación de humedad. Asimismo, es recomendable apagar el aire unos minutos antes de llegar al destino, dejando el ventilador encendido para que se seque el evaporador. 

Cambiar el filtro del aire, fundamental 

Otro paso a realizar es la sustitución del filtro de partículas del aire acondicionado, el componente que se encarga de filtrar el aire que entra al interior del coche y que, con el tiempo, puede acumular suciedad y moho. Sustituirlo regularmente (como norma, se recomienda cambiarlo cada 10.000 o 20.000 kilómetros, según las indicaciones del fabricante y los lugares por donde suelas conducir) no solo mejora la calidad del aire que se respira, sino que también puede reducir los olores desagradables. 

En casos más graves, puede ser necesario acudir a un profesional para una limpieza completa del sistema. Los talleres especializados tienen equipos y productos que eliminan de manera eficaz cualquier rastro de moho y bacterias, dejando el aire acondicionado como nuevo. 

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