Comprar un coche en 2024 no fue sencillo y no parece que en 2025 la tarea vaya a ser más fácil: la incertidumbre de las etiquetas, la implantación de las Zonas de Bajas Emisiones o la prohibición de acceso en lugares como Madrid tienen en ascuas a los conductores, que no saben qué tipo de coche comprar.
¿Basta con un modelo de combustión o es imprescindible que esté electrificado? ¿Ha llegado el momento de dar el salto a la movilidad eléctrica?
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Los datos de matriculaciones de 2024 dejan claro que ya se ha producido el sorpasso:
- Coches de gasolina: 37,2%
- Coches diésel: 9,5%
- Resto: 53,3%
Teniendo en cuenta que el año pasado se vendieron 1.016.885 unidades, lo que supuso un aumento del 7,1% respecto al año anterior, es fácil echar cuentas.
Se matricularon 376.247 automóviles con motor de gasolina, 96.604 coches alimentados por gasóleo y 541.999 vehículos del grupo calificado como ‘resto’.
Por lo que respecta a los modelos de combustión, la situación de los diésel no es algo extraño, pues entraron hace años en declive y actualmente estas motorizaciones han desaparecido de muchos segmentos, siendo inexistentes entre los urbanitas y utilitarios, y muy difíciles de encontrar incluso entre los compactos.
Los gasolina siguen teniendo un peso importante en el mercado, aunque como es lógico, debido a la implantación de medidas como las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), los compradores se decantan cada vez por versiones electrificadas que permiten el acceso a las etiquetas de la DGT con más beneficios, es decir, las Eco y Cero.
Cómo se reparten las ventas de electrificados
Ahora bien, dentro de esa mayoría que es el ‘resto’, es importante identificar a qué tipo de electrificación (microhíbridos, híbridos autorrecargables, híbridos enchufables o eléctricos) corresponden esas matriculaciones.
El informe anual no desgrana todo, pero sí hay información sobre el combo que forman los enchufables y los 100% eléctricos. El total de turismos con tecnología PHEV o EV que se vendió en 2024 fue de 117.255 unidades.
Esto significa que solo una quinta parte de los automóviles electrificados contaban con lo que considera electrificación fuerte.
Es algo lógico, puesto que son los más caros del mercado. Además, tiene sentido ya que son muchas las marcas que, en términos generales, han apostado por la microhibridación, una manera sencilla y barata de conseguir la etiqueta ECO para sus vehículos, por lo que hay una oferta mucho mayor de coches de este tipo.
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