Por el desierto de Tabernas (Almería) desfilaron, en los años sesenta y setenta del siglo XX, Clint Eastwood, Steven Spielberg, Orson Welles, John Huston, Harrison Ford, Raquel Welch, Ursula Andress y otras muchas estrellas. Allí se rodaron más de 600 películas, a veces 50 al año, y el spaghetti western alcanzó la gloria con títulos como El bueno, el feo y el malo o Por un puñado de dólares. Fueron tiempos de bonanza: pueblos enteros participaron como extras y algunos niños ganaban más dinero que sus padres trabajando en minas de la zona.
No puede decirse que hoy el escenario esté recién pintado. El año pasado apenas se rodaron cinco largometrajes y los poblados del oeste, aún en pie, son un reclamo turístico sin suficiente fuerza para sostener la zona. Como consecuencia, la falta de oportunidades económicas y la ausencia de transportes y servicios han provocado que la despoblación sea una amenaza para los pueblos del desierto de Almería, que dependen económicamente de Tabernas.
El número de habitantes se ha reducido a la mitad y además la población ha envejecido. Para evitar la sangría y que los pueblos queden abandonados (como Marchalico, Hueli o Marcheño), Skoda ha puesto en marcha la iniciativa Los cowboys del desierto con una solución concreta: la creación de un servicio de transporte gratuito a modo de diligencia del siglo XXI que vuelva conectar los pueblos del desierto.
“La despoblación en los municipios del interior es cada vez mayor. En el entorno de Tabernas se ubican una decena de pueblos que carecen de conexiones, cuyo núcleo económico y de servicios se encuentra en la localidad tabernense», explica el alcalde de Tabernas, José Díaz.
El servicio que propone Skoda conectará varios pueblos que a día de hoy no disponen de transporte, como Tahal o Senés, y lo ofrecerá un conductor que será contratado a través de una oferta gestionada por el servicio andaluz de empleo.
Para dar a conocer la iniciativa, la marcha checa ha lanzado una película rodada al estilo western en los escenarios originales del desierto que lanza un reto: conseguir cinco millones de visualizaciones para poner en marcha el servicio de diligencia. En el vídeo aparecen como actores los habitantes de los pueblos que pretende usar este servicio de diligencia y relatan por qué cada vez resulta más difícil vivir en estos pueblos.
En la película se narran historias como la de Elisa, que cuenta que no puede ir a comprar sin depender de alguien que tenga coche. O la de Adela, profesora de Tahal, que cada mañana se desplaza desde Senés compartiendo coche con el panadero porque no tiene transporte para ir atrabajar.
Por otra parte, Skoda se ha comprometido a estimular el desarrollo económico de la zona impulsando la industria de cine de la región a través del patrocinio del Almería Western Film Festival. Se trata de un festival de cine western que nació en 2011 con la intención de volver a posicionar Almería como un plató de referencia en el mundo.
Esta no es la primera vez que la marca realiza una iniciativa para asegurar la movilidad de zonas lejanas a grandes núcleos urbanos. En 2015, la marca cedió un vehículo al pueblo de Valdelinares, el más alto de España. Ello permitió crear un puesto de trabajo y conseguir que una familia con hijos se mudara a la localidad para evitar el cierre del colegio por falta de niños.
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