¿Esto era una emergencia o una imprudencia? Al conductor lo han detenido

Ha ocurrido de nuevo: un conductor anónimo ha denunciado la actitud aparentemente temeraria de un automovilista que circulaba por una carretera de montaña de Las Palmas, aviso que ha servido para que la Guardia Civil haya detenido al infractor.

Las cámaras de vídeo instaladas en coches, autobuses y camiones, muy comunes en Rusia y en otros países del este, son cada vez más frecuentes en España con una consecuencia directa: a la Agrupación de Tráfico le resulta mucho más sencillo localizar a algunos automovilistas que cometen imprudencias graves.

«#Gracias a vuestra ayuda Guardia Civil #Tráfico #LasPalmas localiza a un ¿conductor? que ponía en peligro su vida y la de los demás», decía el tuit de la Guardia Civil.

En este caso, como se aprecia en las imágenes compartidas en el tuit, se distingue perfectamente la matrícula de un Peugeot 106 que adelanta a dos vehículos en circunstancias comprometidas: primero al que está grabando el vídeo (en plena curva y sin ninguna visibilidad) y después a un microbús. El conductor del bus se ve incluso obligado a detenerse para facilitar el paso al coche ante la insistencia de su conductor, y a fin de evitar males mayores.

Quien está al volante del Peugeot no duda en circular por el medio de la estrecha carretera e intentar los adelantamientos sin tener en cuenta la posibilidad de que venga alguien en sentido contrario. El turismo lleva las luces de emergencia encendidas, lo que ha abierto el debate porque algunos usuarios de Twitter han considerado que podía tratarse de una emergencia.

De hecho, cabría la justificación, como indica el artículo 70 del Reglamento General de Circulación: «Si, como consecuencia de circunstancias especialmente graves, el conductor de un vehículo no prioritario se viera forzado, sin poder recurrir a otro medio, a efectuar un servicio de los normalmente reservados a los prioritarios, procurará que los demás usuarios adviertan la especial situación en que circula, utilizando para ello el avisador acústico en forma intermitente y conectando la luz de emergencia, si se dispusiera de ella, o agitando un pañuelo o procedimiento similar».

La duda entre otros usuarios surge porque el copiloto aparece en actitud relajada en los primeros segundos del vídeo, con el brazo apoyado fuera de la ventanilla y sosteniendo un cigarrillo. Después parece increpar al conductor del autobús porque abre en exceso la trazada en una de las curvas.

No es la primera vez que la Guardia Civil comparte imágenes de este estilo: la semana pasada publicó otro vídeo en el que un camión efectuó maniobras de adelantamiento igualmente arriesgadas. También fue detenido, según informaba el tuit.