‘Dekotora’ significa ‘decorar un camión’ en japonés y, más que un concepto, es una verdadera afición que se ha convertido en arte. Se trata del tuneo de camiones, práctica común en grandes ciudades niponas como Tokio.
Los preferidos, cómo no, son los camiones de marcas locales, como Mitsubishi o Toyota.
‘Dekotora’, una costosa afición
El ‘dekotora’ es un fenómeno colorido que se originó en Japón en la década de 1970. En ese momento, los japoneses comenzaron a personalizar sus camiones con cromados y pintándolos con insignias y diseños especiales.
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Pero no se detuvieron ahí: rápidamente incorporaron nuevas partes para mejorar la aerodinámica, añadieron luces de neón y otros detalles clásicos, tanto con decoración en su interior como exterior. Una inversión considerable que puede llegar a los miles de euros: unos 100.000, aproximadamente.
Camiones tuneados
Sobre su decoración, en la carrocería se pueden encontrar luces de neón, bombillas de colores, extensiones (en los parachoques y en los retrovisores), acabados cromados de estilos clásicos y también futuristas, incrustaciones de metales brillantes e impresiones de caracteres japoneses con mensajes o imágenes.
Mientras, en su interior, pueden variar tapizados de colores vivos, varios tipos de lámparas, llaveros y portaobjetos. De hecho, tanta es la motivación, existen competencias de dekotora con premios de hasta 10.000 euros.
Estos camiones modificados se hicieron famosos gracias a una serie de películas llamadas Torakku Yayo (Los muchachos de los camiones, donde un personaje heroico conducía su camión tuneado por las rutas y caminos nipones.
Luego, a lo largo de los años, han surgido diferentes estilos de ‘dekotora’ (kansai, kant y retro, principalmente). Cabe señalar que muchos de ellos están basados en samurái y ninjas, por lo que más, más allá de la moda, también incluye un deje de espiritualidad propia de la cultura.
Si bien es una práctica que se realiza más por afición, su circulación por las carreteras japonesas es legal, a pesar de sus luminosos diseños. Según medios locales, estos necesitan licencia de remodelación para la conversión y además no pueden mantener encendidas las luces de neón mientras viajan por la vía pública.
Es decir, los camiones de estilo dekotora, aunque extravagantes, no son ilegales en sí mismos. Sin embargo, deben cumplir con las regulaciones generales y específicas. Además, la decoración exterior y las luces de neón no suelen ser un problema, pero los camioneros deben asegurarse de que no interfieran en la visibilidad de otros conductores.
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