En tres años, la intención de compra de un coche eléctrico apenas ha crecido cuatro puntos porcentuales, de un 14% a un 18%. Los datos del último informe de movilidad de la consultora McKinsey no pintan un buen futuro para los vehículos eléctricos, aunque sea el que, por el momento, ha planteado Europa a partir del 2035.
Este estudio es mundial y se ha preguntado a ciudadanos de muy diferentes países (desde China a Estados Unidos, pasando por Australia, Japón y Brasil) para entender cuál es la realidad de la electromovilidad hoy en día. Las respuestas no son muy alentadoras.
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Un 29% de los propietarios de un coche eléctrico volverían atrás para comprarse uno de combustión. En Australia y EE UU es donde más decepcionados están los conductores con este tipo de vehículos y casi la mitad de sus propietarios no vovlerían a optar por un modelo con baterías.
El principal motivo es la insuficiente red de recarga para coches eléctricos, un problema muy difundido de manera global. No obstante, para los conductores también es estresante tener que preocuparse sobre la carga de la batería o molesto de tener que planificar en exceso los viajes largos.
Pero es que, además, el porcentaje de conductores que ni siquiera se plantean adquirir un vehículo eléctrico porque, simplemente, no quieren sigue siendo del 21%. Los compradores que sí se lo comprarían se quedan en un 18% mientras que la mejor opción para muchos es optar por un híbrido enchufable como próxima compra.
Por qué no se compran coches eléctricos
El precio sigue siendo el principal motivo por el que los conductores no quieren dar el salto a los coches eléctricos. Además, en el mismo estudio se confirma que los conductores que sí están interesados en modelos electrificados son aquellos que ya conducen un coche de alta gama.
Por detrás del precio, están las preocupaciones de la recarga de la batería y las autonomías como principales argumentos para decir que no al coche eléctrico.
Quiénes se comprarán un coche eléctrico
En el informe de McKinsey se ve cómo hay un claro perfil de comprador de coche eléctrico. Aquellos que se plantean un modelo de baterías como próximo automóvil son los que tienen mayores ingresos mensuales (más de 6.000 dólares al mes antes de pagar impuestos), viven en zonas urbanas y son más jóvenes, con una media de 42 años frente a casi 51 de los escépticos del coche eléctrico.
Además, conducen de media al año más kilómetros y son aficionados a la tecnología, un factor al que le dan gran importancia. Por último, aquellos que se comprarán un eléctrico como próximo automóvil pueden recargarlo en casa.
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