Solidaridad sobre dos ruedas

Siempre he pensado y defendido que el colectivo de los motoristas es tremendamente solidario. Y no me refiero únicamente, que también, a que siempre estamos dispuestos a ayudarnos entre nosotros, sino a la disponibilidad de todos para colaborar o participar en cualquier iniciativa que pueda traducirse en el bien común. Puede sonar a argumento vacío o sin trascendencia, pero pienso que tiene más de la que podamos imaginar. Llevar juguetes en Navidad a niños sin recursos o darles una simple vuelta en moto arroja una luz sobre vidas poco favorecidas que quizá no lleguemos a valorar los que tenemos la suerte de cara.

La próxima semana, el sábado 24 y domingo 25 de marzo, los motoristas tenemos una nueva oportunidad de demostrar de qué pasta estamos hechos. Se trata de un evento puesto en marcha por Harley-Davidson España, aunque este detalle resulte accesorio. Debemos valorar  y agradecer el esfuerzo de la marca por organizarlo, pero lo importante será que los que vamos en moto respondamos a su llamada. Y el asunto no puede ser más sencillo… y tampoco más productivo. Lo denominan, por segundo año consecutivo, Open House Solidario y se trata simplemente de hacer kilómetros en moto que la marca convertirá en dinero destinado a Intermón Oxfam.

No es necesario, que quede claro, conducir una Harley, con cualquier moto se puede contribuir a una causa noble. Hace falta, eso sí, acudir a un concesionario oficial de la marca para registrar el kilometraje al inicio y al final de nuestra ruta motera; un trámite imprescindible para controlar la distancia recorrida, puesto que cada uno de esos kilómetros se traducirá en cinco céntimos de euro. Por eso la iniciativa ha sido bautizada como ‘Cada kilómetro cuenta’, porque quizá en este caso, más que nunca, es así: cuentan para nuestro disfrute y cuentan, antes que nada, para el buen uso que Intermón hará del dinero que Harley done a su organización.

Yo ya participé en año pasado y me pareció una experiencia muy provechosa. Fue con un grupo que salió desde uno de los concesionarios, Makinostra Harley-Davidson Madrid, y desde allí nos pusimos en carretera para completar cerca de 200 kilómetros por esta comunidad. Es decir, que al final de una divertida jornada de moto y amigos, aporté diez euritos para la ONG elegida entonces por la marca de Milwaukee. No está nada mal, me parece a mí, sobre todo si multiplicamos cantidades similares (o superiores) por los miles de motoristas que hicieron lo propio en toda España. Así que yo ya tengo plan para el próximo fin de semana y espero que muchos de vosotros también. Si queréis realizar la inscripción previamente, podéis hacerlo en www.harley-davidson.es/cadakmcuenta. No perdáis la oportunidad…