La vida es cambio y, si no, que se lo pregunten a Harley-Davidson. La marca de Milwaukee, que lleva 113 años fabricando sus icónicas y codiciadas motocicletas, es consciente de que el mercado evoluciona y no se quiere quedar atrás. Por eso, ha anunciado que en aproximadamente cinco años, cuando el precio de los componentes se abarate, lanzará su primera moto eléctrica.
El fabricante ya presentó hace dos años el prototipo LiveWire, que adelantaba una motocicleta 100% eléctrica. De hecho, el concept ha ido evolucionando y se vio una nueva versión en la película ‘Los Vengadores: La era de Ultrón’, que conducía Scarlett Johansonn en el papel de la Viuda Negra.
El prototipo en una de las escenas de la película de MARVEL.
Pese a ello, la marca americana no ha confirmado que el modelo de producción vaya a utilizar la base conocida hasta ahora. Sería lo lógico, puesto que solo habría que perfeccionarla, pero por el momento la puerta está abierta a desarrollar una nueva moto eléctrica desde cero partiendo de modelos de cualquiera de sus familias, desde las pequeñas Sportster a las grandes ruteras Touring.
Lo que sí es de esperar es que optimicen su base mecánica, que en las unidades de la LiveWire permitía hacer el 0-100 km/h en cuatro segundos, tenía limitada la velocidad máxima a 150 km/h y empleaba unas baterías que le daban un autonomía algo escasa, de tan solo 96 km.
Se trata de un movimiento valiente por parte de Harley-Davidson, pero la cuestión es ¿estarán sus fieles seguidores dispuestos a aceptar una eléctrica en la familia? Con el proyecto LiveWire la marca estadounidense ya organizó en su país y en varios de Europa pruebas de los prototipos con clientes de sus productos, con el objetivo de recoger su valoración sobre una futura Harley eléctrica; a la vista de este nuevo movimiento y la confirmación de que una maquina sin emisiones llegará a su catálogo, parece que la percepción de los harlistas debe haber resultado positiva.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.