La familia NineT de BMW Motorrad ya tiene un quinto elemento, la nueva GS Urban. Todos ellos utilizan la misma base mecánica adaptada a la normativa Euro4: el motor bicilíndrico bóxer de la anterior generación con 1.170cc, refrigerado por aire y cuatro válvulas en cada culata que rinde 110 CV a 7.750 rpm. El embrague monodisco en seco va en el centro del propulsor y se conecta a una caja de cambios independiente de seis velocidades.
El bastidor es la estructura multitubular de acero típica de BMW, que se une al motor para aporta mayor rigidez al conjunto. El semi-chasis posterior se puede desmontar y elegir entre distintas configuraciones: monoplaza con asiento pequeño y un robusto trasportín para adaptar un baúl trasero, o un asiento de dos plazas para llevar acompañante con la correspondiente estructura para los reposapiés.
Como el resto de componentes de la familia NineT, esta GS Urban es una gran moto para proyectos de personalización. Existe una primera opción que el cliente puede elegir de fábrica y sin sobrecoste, se trata de las ruedas, que pueden ser de aleación o de radios, con neumáticos de carretera, mixtos o de tacos, dependiendo de la utilización principal que se vaya a dar a la moto.
El diseño de la Urban es muy evocador. / BMW
Incorpora ABS de serie y las pinzas de freno delanteras son de cuatro pistones con latiguillos metálicos para asegurar eficacia y buen tacto en la frenada. Como opción está disponible el sistema de control de tracción ASC que utiliza los mismos sensores del ABS.
En su larga trayectoria, las siglas GS se han ganado una gran reputación como moto pasional, aventurera y viajera incansable. Esta GS Urban no quiere desentonar pero tiene una misión más bien estilística y se presenta con la decoración cromática de la primera R80 GS, acentuada por las formas de la carcasa del faro y la aleta delantera para evocar un fiel reflejo de aquella.
Colores clásicos en la elección decorativa de esta versión.
La toma de contacto con la más novedosa Nine-T se realizó en el Alto Ampurdán, en cuidadas carreteras del norte de Cataluña, incluyendo 15 kilómetros por caminos anchos y pistas forestales. Evidentemente no se trata de una trail al uso y fuera del asfalto solo permite suaves incursiones a ritmos moderados, pero en el resto de escenarios se comporta prácticamente como sus hermanas de gama. Por su posición, con manillar ancho y espalda erguida, resulta cómoda, su comportamiento es noble y fácil de conducir. Aunque pesa 222 kilos, la potencia y par de su motor proporcionan un dinamismo más que correcto y aseguran diversión en tramos revirados. Acelera, frena y es muy estable.
Su precio es de 13.879 euros y va dirigida a un público muy variado, no solo para los veteranos nostálgicos amantes del estilo vintage, también para aquellos que busquen una moto polivalente, fiable, segura y funcional con una innegable personalidad y un halo de tradición.
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