Cuatro modelos compactos de primera categoría: vida a bordo

Todos pueden alojar cuatro adultos con desahogo y añaden una quinta plaza para niños sin muchos aprietos. Pero con tres atrás, los dos de los extremos se desplazan a los lados y rozan con la cabeza en los laterales del techo, al menos en el Honda, el Mazda y, sobre todo, el Toyota. Los más amplios son el Civic y el Golf, con ventaja del primero por anchura y espacio para las piernas, aunque con un techo más bajo.

El Volkswagen tiene los mejores asientos delanteros, más amplios y cómodos que los del Mazda 3 y el Corolla —cortos de banqueta—, y es el mejor para llevar tres adultos atrás, sobre todo si son altos: ofrece más espacio y no exige agacharse tanto como el Toyota y el Mazda para entrar atrás. El mejor maletero es el del Civic, seguido del Mazda 3 y el Golf, y el del Corolla resulta más justo y tiene unas formas irregulares y menos aprovechables.

En los acabados, el Mazda 3 y el Golf están un poco por delante. El primero tiene una instrumentación clásica de agujas, pero digitalizada, y un salpicadero moderno que integra bien la pantalla (8,8 pulgadas) y las salidas de climatización, aunque con un sistema de información con navegabilidad y menú engorrosos y poco intuitivos. El Volkswagen resulta vistoso por dentro, con una pantalla grande bien integrada y un ambiente que transmite solidez.

Y los dos ofrecen una calidad de ajustes y materiales algo mejores. El Honda y el Toyota ofrecen también un ambiente moderno y atractivo, pero con algún detalle mejorable, como el tapizado posterior de los asientos delanteros del Corolla. Y mientras el Civic no está tan bien insonorizado como los demás, el Toyota destaca por su rodar silencioso en ciudad.

El Mazda y el Volkswagen son los más cómodos en conjunto, con mejores asientos, sobre todo el Golf, y suspensiones que filtran mejor los baches. El Toyota es también confortable, en especial en ciudad porque circula mucho tiempo con propulsión eléctrica. Y el Civic busca más la deportividad y no resulta tan suave en los baches.