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Las normas están para cumplirlas y en la carretera es fundamental para evitar cualquier susto o accidente. Sin embargo, en muchas ocasiones los conductores no respetan las reglas e intentan saltárselas, a no ser que justo en ese momento, les pille la policía. Esto es lo que le ha ocurrido a un motorista en plena carretera en Barcelona.
El conductor estaba detrás de un autobús, ambos parados en un semáforo en rojo y su intención era rebasarle en una vía con línea continua. Cuando estaba a punto de hacerlo, vio cómo la Guardia Urbana de Barcelona se acercaba y dio marcha atrás en su maniobra. Ante esta situación, los agentes le dieron un toque de atención para advertirle de su imprudencia.
¿Por qué muchos conductores de Barcelona ponen esta nota en sus coches? Parece casi una provocación Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram
