El Observatorio Cetelem acaba de lanzar una nueva entrega de su Estudio Motor, en el que analiza al detalle las opiniones de los conductores españoles. Y lo más destacado es que ha crecido el interés por los coches eléctricos. En solo un año, la intención de compra ha pasado del 10% al 15%.
Y todo en un contexto cambiante y en el que predomina la incertidumbre. Por un lado, la crisis de los microchips ha provocado un aumento de la compra de coches de segunda mano y de su importe medio (+21%, hasta 6.189 euros). Por otro, el 53% de los encuestados ha tenido que esperar mucho por su coche nuevo o, directamente, ha cambiado la intención de compra.
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De hecho, la escasez de oferta de vehículos y la subida del coste energético determinan las decisiones. Si estuvieran a punto de comprar un coche de gasolina o diésel, el 32,2% de los españoles paralizaría la operación hasta que la situación mejorara. Entre los interesados en un modelo eléctrico, el porcentaje de arrepentimiento llegaría al 50%.
Intención de compra
Respecto a la posible próxima compra de un coche, el 76% se decanta por un modelo nuevo, mientras que el 24% prefiere un coche de segunda mano. Sobre el tipo de motorizaciones hay más variedad: el 15% preferiría un eléctrico (frente al 10% del año anterior), mientras que la mayoría apuesta por un híbrido (40%). Las motorizaciones tradicionales –gasolina y gasóleo– se alcanzan un 22% cada una.
Las dudas sobre los eléctricos
A pesar de que la intención de compra de los coches eléctricos aumenta, muchos conductores no lo tienen claro en el momento de la decisión final. Estos son los motivos:
La autonomía es una de las dudas recurrentes en torno a los coches eléctricos. Solo una minoría (17%) se conforma con un alcance de menos de 200 kilómetros, y llama la atención que un porcentaje elevado (21%) pide a los eléctricos más de 500 kilómetros de rango de uso.
Hay otros datos relevantes que demuestran que la situación actual influye en la compra y el uso de un vehículo. Para el 34% de los encuestados, el alto precio de los combustibles empuja a dejar el vehículo en casa. Por la misma razón, casi uno de cada tres automovilistas se plantea adquirir un híbrido o un eléctrico.
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