Del panorama automovilístico actual, el Aznom Palladium es, posiblemente, uno de los coches más peculiares. Creado por una marca italiana, pero con la base del estadounidense Dodge Ram, es un pick-up que apuesta por el lujo de la limusina. Ahora, uno de sus adinerados compradores, ha hecho que tenga todavía más músculo del habitual.
El Palladium convencional cuenta con un 5.7 V8 HEMI con dos turbos que entrega 710 CV y 950 Nm, y se asocia a una transmisión automática de ocho marchas y a un sistema de tracción integral.
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Se trata de una configuración poderosa, pero que palidece con la de esta unidad. Va un paso más lejos y monta bajo el capó un bloque 6.4 V8 HEMI que desarrolla 850 CV y 1.050 Nm de par máximo. El propulsor ha recibido una amplia variedad de modificaciones, desde la incorporación de dos turbos a pistones forjados, pasando por cambios en el sistema de refrigeración.
Se combina con una caja de cambios automática de ocho velocidades y es 4×4, como la otra variante, pero Aznom no ha desvelado sus prestaciones. A todas luces serán mejores que las de la variante convencional, que acelera de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos y tiene una velocidad máxima de 210 km/h.
El lujo del Aznom
A nivel estético no se diferencia ni un ápice, luciendo la misma musculosa imagen. Muestra una contundente parrilla metalizada, llantas de 22 pulgadas y una zaga que elimina la caja habitual de los pick-up para crear una caída del techo bastante estilizada.
El interior es el epítome del lujo, con todo el habitáculo tapizado en cuero bitono y las plazas traseras formando un cómodo sofá, con mucho espacio para las piernas, una pantalla para cada ocupante, una mesa central con posavasos e iluminación ambiental LED, entre otras cosas.
Este Aznom Palladium sobresale respecto al resto, pero el modelo estándar, del que solo se van a fabricar nueve unidades (para un total de una decena), también es muy exclusivo y cuesta 1,5 millones de dólares.
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