Barato pero dañino: el tipo de parasol para el coche que ningún conductor debería usar

Una sensación muy desagradable en días de calor es subirse al coche y que parezca un horno, o tocar el volante y que queme la palma de las manos. Estas situaciones, generadas por el efecto lupa, se pueden minimizar con un parasol para el coche, un producto que tiene como función la protección ante los rayos ultravioletas y aminorar los efectos del sol en el vehículo.

Es fácil de llevar en el coche, pues por su tamaño y peso no requiere de mucho espacio. Es barato, ya que sus precios arrancan en torno a los cinco euros, y la oferta en el mercado es amplia, así que resulta sencillo de encontrar. No hay excusas para no utilizar un parasol cuando llegan las altas temperaturas.

Un parasol no recomendado

Hay diversos tipos, pero los parasoles de cartón no son recomendables, debido a que no ofrecen protección contra los rayos ultravioleta (como sí lo hacen los de otros materiales).

Y aunque son populares por su bajo precio, no son aptos por su incapacidad para bloquear los rayos UV lo que puede provocar un calentamiento excesivo del interior del coche. Además, no protegen los asientos de la decoloración y del desgaste causados por la exposición al sol.

Entonces, ¿cuál elegir?

Por lo tanto, es preferible optar por parasoles hechos de materiales sintéticos como el poliéster o el nailon, que son más eficaces para bloquear los rayos UV y mantener una temperatura agradable dentro del vehículo.

Un buen parasol

Estos productos son tan eficaces por las siguientes razones:

1. Protegen el interior del coche. Pueden ralentizar el deterioro de todas las superficies del salpicadero, especialmente las plásticas, que son más vulnerables y las que más se recalientan con los rayos del sol. Otro punto a favor es que también protegen la tapicería.
2. Reducen la sensación de fatiga. Conducir con temperaturas muy elevadas puede causar fatiga y los parasoles reducen esa sensación. Además, con mucho calor en el habitáculo, las distracciones son más frecuentes al volante.
3. Favorecen la ventilación del habitáculo. Al ser más baja la temperatura, se consigue que el ambiente ideal se alcance en menos tiempo.
4. Reducen la cantidad de benceno en el interior. El benceno es una toxina que liberan los elementos plásticos al exponerse a los rayos del sol y cuya inhalación puede ser perjudicial.

Una alternativa es este parasol plegable de Amazon. Es el más vendido y tiene más de cinco mil valoraciones, aunque lo mejor es su precio: 6,79 euros. Es igual de económico que los de cartón, pero incluye más características:

• Plegable
• Fácil de montar
• Bolsa de guardado incluida
• Reflexión UV
• Reflexión térmica

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