Las empresas de alquiler de coches tienen sedes en lugares muy diversos, pero tienden a concentrarse en estaciones de tren y aeropuertos, donde los recién llegados pueden tener necesidad de un vehículo para continuar su viaje. Cualquiera que haya realizado una reserva previa con una compañía, esperaría que estuviera ahí cuando llegue a su destino, pero eso no es lo que ocurrió en un aeropuerto de Nueva York, lo que acabó derivando en una situación dantesca.
Los hechos tuvieron lugar en Syracuse, el día 20 de julio. Los clientes que acudieron al puesto de Hertz a última hora de la tarde descubrieron que allí no había ningún empleado de la compañía.
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Según las indicaciones de la misma, debía haber trabajadores hasta la una y media de la mañana, pero, revisando las cámaras de seguridad, se comprobó que todos ellos habían abandonado sus puestos a las siete y 13 minutos de la tarde, mucho antes de lo habitual. Solo uno de los empleados reapareció sobre las ocho y media, pero estuvo durante un cuarto de hora y volvió a irse.
Esto, para aquellos que quisieran alquilar un coche in situ no supuso más problema que el de ir a hablar con otra empresa del sector, pero la situación era muy diferente para aquellos que ya habían contratado el servicio de manera previa.
Durante el periodo en el que no hubo trabajadores, unas 20 personas acudieron a recoger el coche que habían acordado, solo para encontrarse que no había nadie que les atendiera. Además, en esa localización Hertz no tiene ningún sistema de autoservicio, lo que hizo que las cosas empeoraran.
A problemas, soluciones
Como no sabían que hacer, alguien decidió solucionar el problema por su cuenta y otros tantos le siguieron: fueron a la zona del aparcamiento reservada para modelos de la compañía, buscaron coches que tuvieran las llaves dentro y cogieron el que pensaban que era el suyo.
Una de las personas afectadas llamó al teléfono de ayuda del aeropuerto y dijo lo siguiente, según recoge CBS News: “Varios clientes con reservas previas revisaron los coches en la sección Hertz del garaje y simplemente cogieron coches al azar que tenían llaves”. De hecho, el mismo cliente afirmó que el motivo por el que estaba llamando es porque no había podido encontrar un coche que tuviera las llaves para llevárselo.
El aeropuerto contactó con Hertz, que respondió pidiendo disculpas por el servicio prestado, pero se desconoce qué medidas tomaron al respecto.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.