Hace tiempo que dejó de comercializarse en España (aunque todavía se puede adquirir como Lancia Thema), pero en Norteamérica el 300 sigue siendo uno de los puntales de Chrysler y, por eso, la marca sigue apostando por él. La marca ha aprovechado el Salón de Los Ángeles para presentar una nueva actualización del modelo, principalmente estética, pero que también incluye pequeños cambios mecánicos y de equipamiento.
El mayor cambio recae en el frontal, donde el modelo luce ahora una parrilla un 30% más grande que la anterior y lleva el logo incorporado dentro. En la zaga se ha aprovechado para rediseñar los pilotos traseros y se ha añadido un pequeño alerón sobre el portón del maletero.
En el interior, todas las versiones del modelo cuentan de serie con una pantalla táctil de siete pulgadas, mientras que en los niveles superiores será un poco mayor: 8,4 pulgadas. Formará parte del sistema de infotaintment Uconnect que, como novedad, puede tener de manera gratuita la posibilidad de acceder a internet mediante Wi-Fi. La gama estará formada por tres niveles de acabado: Limited, S y Platinum.
Bajando la vista vemos como la tradicional palanca para el cambio automático de seis velocidades se ha sustituido por un mando giratorio que controla la nueva transmisión de ocho relaciones. Otra mejora mecánica afecta a la dirección, que ahora es eléctrica y permite elegir entre tres modos, Comfort, Normal y Sport. Los motores disponibles son un V6 3.6 de 300 CV y un V8 5.7 de 363 CV
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.