Nürburgring es un circuito especial. Tiene calificación de autopista de peaje, lo que lo distancia mucho de un trazado al uso… y permite que quien quiera pueda entrar a dar una vuelta. Hasta ahí bien, uno esperaría que quien se mete lo hace para exprimir su deportivo o su moto de alta cilindrada, pero también hay quien recorre el Infierno Verde en otras monturas… digamos, menos convencionales.
Nota: El de la furgoneta DHL le va pisando pero bien.
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