El Lexus LC es el deportivo de la marca nipona, disponible en carrocerías cupé (desde 128.000 euros) o cabrio (desde 156.500 euros), y que ahora se pone al día mejorando su comportamiento dinámico para quienes quieran circular a buen ritmo sin perder confort para los viajes más largos.
Lexus se ha centrado en la suspensión de modelo para mejorar su dinamismo, llevando a cabo una puesta a punto específica, tanto en el eje delantero como en el trasero, que “potencia la sensación de contacto con la carretera, la respuesta lineal y la eficacia de la dirección”. Esto resulta en un comportamiento más preciso.
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Es especialmente notable al utilizar el modo de conducción ‘S+’, en el que se reducen los balanceos y se mejora la respuesta a las órdenes del conductor.
Para lograr una mayor comodidad para los ocupantes, se ha instalado una nueva estructura para los asientos en la zona del cojín y el respaldo, lo que redunda en un confort superior. También aparece un nuevo bloqueo en la palanca de cambios para evitar que, por accidente, se pase del modo neutro al directo o a la marcha atrás.
Además, como parte de la actualización de la gama, el LC Cabrio amplía su oferta de acabados con el nuevo Bespoke, que suma llantas de 21 pulgadas con cinco radios, techo de lona en color azul marino, un interior que combina blanco y azul, y tapicería en cuero de semi-anilina perforado blanco.
Es posible añadir el Pack Black, que incorpora detalles en negro tanto para la parrilla como para los grupos ópticos delanteros y traseros.
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