BMW inauguró su gama todocamino con el X5 en 1999. Han pasado, por tanto, ya tres lustros desde ese debut y ahora la oferta contempla, además de aquel modelo precursor, al X1, X3, X4 y X6 (y pronto le llegará el turno al X7). Y es ahora el X6 el que llega a su segunda generación, heredera de un concepto que ya resultó revolucionario cuando se lanzó en 2008: la polivalencia de un SUV con la elegancia y dinamismo de una carrocería de cinco puertas pero de estilo coupé.
El atractivo de este modelo es indiscutible y es así como tampoco se producen cambios radicales en su diseño, tan sólo se introducen pequeños matices que actualizan algunas zonas y mejoran la aerodinámica (ahora disfruta de un Cx del 0,32). Eso sí, crece en sus dimensiones generales (por ejemplo, es 32 milímetros más largo) y ese incremento se traduce en una mejor habitabilidad para sus cinco plazas homologadas, frente a las cuatro anteriores. Las traseras son ahora más cómoda porque también se ha eliminado el túnel de la transmisión que recorría el piso del coche en su zona central. El maletero se beneficia de este aumento dimensional, con una capacidad mínima de 520 litros (una veintena más) y una máxima de 1.525 abatiendo los asientos posteriores.
BMW asegura que la calidad general del nuevo X6 ha evolucionado sobre una base que ya era excepcional y es comparable a los estándares que se encuentran en sus berlinas de representación, como los Serie 6 o 7. Los más exigentes podrán completar un equipamiento base que es muy completo con multitud de opciones de confort, seguridad y telemáticas, junto con la disponibilidad del paquete deportivo M (por primera vez en este modelo) y todas las posibilidades de personalización de la división BMW Individual.
La oferta mecánica de esta segunda generación está compuesta por dos motores de gasolina y tres de gasóleo. Los primeros son el 35i de 306 CV y el 50i de 450 CV, mientras que los incondicionales del diésel podrán elegir entre el 30d de 258 CV, el 40d de 313 y el triturbo M 50d con 381 CV. En cualquiera de las motorizaciones aparece la tracción total permanente y el cambio automático de ocho relaciones con levas en el volante.
El nuevo BMW X6 ya se encuentra a la venta en la red de concesionarios de la marca, en un abanico de precios que va de los 74.800 a los 106.600 euros. Otra mejora valiosa en esta segunda generación es la ampliación de garantía hasta los tres años o 100.000 kilómetros.
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