Renault nos puso los dientes largos hace un mes con el adelanto en vídeo del Renault Sport RS 01, un modelo que la propia marca definía como “el próximo vehículo de competición, que será la estrella de las World Series by Renault”. No hemos tenido que esperar mucho para verlo al completo, y ha cumplido las expectativas.
Afinando la inspiración del modelo, desde Renault lo ven como una mezcla entre “la belleza del DeZir” y “el rendimiento de un Fórmula Renault 3.5”, y que, a nivel mecánico, se encuentra en un punto intermedio entre el GT3 y el DTM.
Tiene una longitud de 4.710 mm, una anchura de 2.000 mm y una altura de tan solo 1.120 mm, cuenta con un chasis monocasco de carbono y marca sobre la balanza un peso de 1.100 kg. Su deportividad se potencia todavía más con el diseño de la carrocería, claramente aerodinámico gracias a las enormes entradas y salidas de aire, los marcados pasos de rueda, el gran difusor trasero y el prominente alerón.
De moverlo se encarga el motor de Nissan GT-R, un Nismo V6 Biturbo 3.8 que desarrolla 500 CV de potencia a 6.800 rpm y un par máximo de 600 Nm. El bloque, situado en posición central trasera, se combina con una caja de cambios secuencial de siete relaciones para superar los 300 km/h de velocidad punta, aunque el fabricante francés no ha hecho públicos sus datos de aceleración.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.