En España, la transición hacia la movilidad eléctrica gana impulso con una ayuda poco conocida pero cada vez más efectiva: el Certificado de Ahorro Energético (CAE). Este mecanismo estatal recompensa tanto a particulares como a empresas que sustituyen un vehículo de combustión por uno 100% eléctrico, con un ahorro directo en el momento de la compra.
El procedimiento es sencillo y transparente. Al entregar el coche antiguo de combustión (debe estar a tu nombre durante al menos un año) y adquirir un vehículo eléctrico nuevo, el concesionario genera un CAE que certifica el ahorro energético generado. Ese certificado se convierte en un descuento inmediato sobre la factura y, lo que es mejor, sin trámites administrativos complejos y sin esperas.
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Importe variable
El importe puede variar según la marca, con descuentos que oscilan entre 800 y los 1.000 euros. Entre quienes ya ofrecen esta ventaja destacan:
- Renault, Dacia, Alpine, Hyundai y Kia: aproximadamente 800 euros.
- BMW y Mini: cerca de 900 euros.
- Fiat, Volkswagen, Skoda, Peugeot, Citroën, Opel y Leapmotor (grupo Stellantis): hasta 1.000 euros.
- BYD: ofrece un descuento aproximado de 950 euros.
La razón por la que cada marca ofrece una ayuda distinta con el CAE al comprar un coche eléctrico en España radica en cómo funciona el sistema y las estrategias comerciales de cada fabricante.
El CAE es un certificado que genera ahorro energético, no una subvención fija del gobierno. Las empresas energéticas y fabricantes que fomentan el ahorro energético pueden generar estos certificados al vender coches eléctricos que sustituyen vehículos de combustión. Luego venden estos certificados a compañías que deben cumplir objetivos de eficiencia energética. Así, el valor del certificado se traduce en un descuento directo para el cliente final. Finalmente, las marcas deciden cuánto del valor del certificado trasladan al comprador.
El precio de estos certificados puede variar según la negociación entre fabricantes, concesionarios y empresas energéticas. Algunas marcas ofrecen trasladar casi todo el valor del CAE al cliente, mientras que otras optan por descuentos menores para mantener margen de beneficio o por estrategias de marketing.
Ventajas del CAE
Una de las mayores ventajas del CAE es su compatibilidad con otras ayudas públicas: se puede sumar al Plan Moves III, deducciones fiscales en el IRPF, subvenciones autonómicas o exenciones de impuestos locales como el de circulación. Esta acumulación de incentivos puede reducir notablemente el precio final de un vehículo eléctrico.
Además, la herramienta no solo es eficaz para el comprador, sino que también contribuye al cumplimiento de los objetivos de eficiencia energética por parte de las empresas energéticas, que compran estos certificados como parte de sus compromisos con el Fondo Nacional de Eficiencia Energética.
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Periodista especializado en motor desde hace más de 20 años, ha trabajado en diferentes gabinetes de prensa (Federación Española de Automovilismo o Circuito del Jarama) y medios especializados (Motor 16, Marca Motor o Auto Bild). Apasionado de coches, motos y, ahora también, de los cacharros con alas.