Elon Musk suele verse implicado en polémicas de todo tipo, todavía más desde que se ha unido al equipo de Donald Trump. Sin embargo, es una tendencia que lleva siendo así desde hace mucho y en muchas ocasiones es por su propia culpa, por hacer promesas que luego no ha logrado materializar o que han acabado siendo fiascos.
En su trayectoria son bastante comunes los anuncios grandilocuentes que luego se han quedado en nada. Estos son algunos de ellos.
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Retrasos que duran años
Ha sido una tónica habitual en la historia de Tesla: se anuncia un nuevo modelo que luego se retrasa si no en una, en múltiples ocasiones. Aunque ha habido más casos, los más notables han sido los del Roadster y el Cybertruck.
Al primero se le espera desde su anuncio en 2017. Inicialmente iba a lanzarse en 2020, pero la covid-19 la retrasó hasta 2022. A finales de 2021 Musk anunció un nuevo retraso hasta 2023, pero ya es 2025 y todavía no hay rastro del hiperdeportivo.
En cuanto al Tesla Cybertruck, su puesta de largo fue en 2019 y no fue muy bien, porque sus cristales irrompibles se quebraron al lanzar contra ellos una bola de metal. La fecha de lanzamiento estipulada era para mediados de 2021, luego se anunció un retraso hasta 2022 y más adelante fijó la fecha en la primera mitad de 2023. Tampoco se llegó a ella, pero finalmente empezó a venderse en 2024.
A vueltas con la conducción autónoma
Elon Musk ha destacado por su apuesta total por la llegada de la conducción autónoma. Su Autopilot prometía ser capaz de conducir por su cuenta, con una serie de funciones que se fueron incorporando a tal fin.
Sin embargo, los vehículos equipados con el sistema han protagonizado numerosos percances que han puesto a la marca en el ojo del huracán constantemente, recibiendo demandas, viéndose envuelta en juicios y, en ocasiones, perdiéndolos.

Problemas de logística y entregas
La rampa de producción de la firma también fue un problema. Acostumbrada a ser una marca relativamente pequeña cuando solo producía los Tesla Model S y Tesla Model X, pasar a un modelo de gran volumen como el Model 3 la superó. Hubo una demanda enorme que provocó enormes listas de espera.
Sin embargo, es algo que ya ha solventado, como demuestra que el Tesla Model Y haya sido el coche más vendido del mundo durante dos años seguidos.
Problemas de calidad
Aunque haya evolucionado como fabricante, la calidad de sus vehículos sigue siendo un debe para Tesla. Las llamadas a revisión son constantes y los usuarios se quejan de problemas como malos acabados, piezas que no encajan, etc.
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