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El insólito suceso tuvo lugar la noche del 31 de diciembre pasado en Qualicum Beach, en la Columbia Británica (Canadá), cuando un hombre de 50 años contactó a la Real Policía Montada de Canadá (RCMP) para reportar que otro automovilista, según su criterio, conducía bajo los efectos del alcohol. Sin embargo, los hechos tomaron un giro inesperado.
El buen samaritano decidió bloquear con su coche el vehículo, el del presunto infractor, y esperar a que llegaran los agentes. Cuando la policía se presentó en el lugar, le hicieron las respectivas pruebas y verificaron que el sospechoso denunciado estaba sobrio. La conducta errática que generó la confusión se debió, según explicaron los propios agentes, a las dificultades que tiene esa persona para conducir de noche.
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La sorpresa llegó cuando los oficiales notaron olor a alcohol en el aliento del denunciante. Para confirmar sus sospechas, de que podía ir borracho, le realizaron el preceptivo test de alcoholemia y corroboraron que estaba bajo los efectos del alcohol. El resultado fue una suspensión inmediata del carnet de conducir durante 90 días y la retención del vehículo durante 30 días.
El sargento Shane Worth, de la RCMP de Oceanside, lamentó el incidente y recordó la importancia de no conducir después de consumir alcohol. “Lamentablemente, hay muchas personas que todavía creen que está bien beber y conducir”, declaró Worth. Además, destacó que esa misma noche otros dos conductores también fueron detenidos por estar bajo los efectos del alcohol.
Seguridad vial
Esta anécdota del denunciante denunciado, que se ha vuelto viral en redes sociales, también ha generado comentarios humorísticos sobre el curioso desenlace. Sin embargo, las autoridades insisten en la gravedad del problema y en la necesidad de concienciar sobre los riesgos de conducir en estado de ebriedad.
En España, durante este 2025, se va a aprobar la rebaja de la tasa máxima de alcohol permitida hasta los 0,20 gramos por litro de sangre, que equivale a 0,10 miligramos por litro de aire espirado (resultado en el alcoholímetro). Una cantidad tan ínfima que hará que incluso con una pequeña ingesta de alcohol se dé positivo. Esta reforma de la ley de tráfico ya está en trámite en el Congreso de los Diputados.
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