Dicen que la vida puede cambiar en un par de segundos y así lo muestran las siguientes imágenes. Hace unos días, se hizo público un vídeo de un accidente que parecía de película.
Desde fuera de la carretera, el coche de una conductora de Texas, Estados Unidos, recibió el impacto de un arma larga y afilada. Se trataba de una enorme lanza. Y aunque podría haber terminado en una historia fatal, todo quedó en un susto.
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El impacto: en imágenes
A este vídeo se suma un hecho similar, también en Estados Unidos. Sucedió el 9 de septiembre en la carretera interestatal de Utah; un agradable viaje familiar se transformó en una verdadera pesadilla.
Aunque la familia pensó que se trataba de una piedra, el coche fue sorprendido por la base una de una silla de oficina que golpeó el parabrisas justo en el sitio de donde se situaba la hermana mayor. La base metálica se transformó en un verdadero bumerán y todo quedó grabado en la cámara de seguridad de coche.
“Era la base de una silla de oficina, sólo las partes metálicas. No tenía ninguna de las ruedas. Otro automóvil chocó contra la pieza y escupió debajo de su llanta, pasó por encima del auto que estaba a nuestro lado y cayó sobre nuestro parabrisas”, dijo a los medios estadounidenses Lily Eaton, que viajaba en el coche.
El parabrisas, aunque obviamente quedó trizado, aguantó el fuerte golpe. De los cinco integrantes del coche, nadie sufrió lesiones graves.
Roturas en el parabrisas
En caso de sufrir un impacto en el parabrisas, hay que actuar rápidamente: cuanto más tiempo pase o más kilómetros se recorran, más se dañará el cristal. Pero, para evitar pasar por el taller, o hasta que se pueda pedir cita si el daño es irreparable, convienen tratar de detener el avance de la rotura con un kit de reparación.
Los kit de reparación –se venden desde 10 euros– incluyen una resina que impide la expansión del desperfecto. Funcionan si el impacto es circular y no supera los dos centímetros de diámetro (como una moneda de dos euros, aproximadamente), o si es una grieta lineal con una longitud inferior a 20 centímetros.
Debe utilizarse lo antes posible, ya que si entra suciedad en la fisura la resina no resulta eficaz. Además, antes de aplicar el producto hay que limpiar el cristal con un producto adecuado y secarlo después.
Si la rotura es mínima, se pueden plantear soluciones más caseras y económicas, como aplicar una capa de pintauñas transparente, una gota de pegamento de contacto o adherir un trozo de cinta adhesiva. Pero estas alternativas son solo parches, y es probable que el daño siga creciendo.
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