Para los jugadores del Leicester City, la alegría y el orgullo de ganar la Premier League siendo un club modesto no fue el único premio. De propina, un cochazo: un BMW i8. La primera intención del dueño del equipo, Vichai Srivaddhanaprabha, fue regalar a cada integrante de la plantilla un Mercedes Clase B eléctrico.
Sin embargo, el dirigente ha cambiado de opinión y, en lugar del familiar, ha comprado un BMW i8 a cada uno de sus jugadores.
19 BMW i8 ready for the players following last season’s triumph. What a chairman.
U n b e l i e v a b l e.#LCFC ? pic.twitter.com/YCOJP1tTw8
— Leicester City FC (@FIRST4LCFC) 5 de agosto de 2016
Que sea mejor o peor regalo suponemos que depende del gusto de cada uno, pero lo que sí está claro es que se ha rascado el bolsillo más de lo previsto. Inicialmente iba a desembolsar 1,2 millones de euros para hacerse con los vehículos, pero con el cambio al deportivo alemán la cantidad ha subido hasta los 2,3 millones de euros.
Pero la cifra, bastante elevada, no es mucho para Srivaddhanaprabha: su fortuna se estima en unos 2.700 millones de euros.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram