Los coches chinos han mejorado mucho en los últimos años. Conocidos popularmente por su copias y clones, en la época más reciente han surgido marcas con modelos propios de alta calidad. Sin embargo, de vez en cuando sale alguna creación que retoma las malas costumbres anteriores. El último ejemplo es el Shandong P8, que imita a su manera al Bugatti Chiron.
La intención queda patente, pero la ejecución no es la mejor posible, tanto por lo que respecta al diseño como a la mecánica.
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Shandong P8, el Bugatti Chiron chino
El modelo se parece al Bugatti, pero encogido y con unas proporciones y detalles que distan mucho de la planta del hiperdeportivo. No falta la característica parrilla en forma de U y también es similar el diseño de los grupos ópticos delanteros, e incluso el dibujo en forma de C del pilar trasero, que divide la carrocería bitono. La zaga es la parte que menos semejanzas tiene, pues integra unos grupos ópticos redondos.
Las dimensiones, mucho menores en el P8, hacen que el conjunto se vea desproporcionado: mide 4.100 milímetros de largo, 1.800 milímetros de ancho y 1.430 milímetros de alto. El Bugatti Chiron es tiene una longitud de 4.544 milímetros.
Una mecánica de juguete
El mayor cambio, en todo caso, están en el apartado mecánico, que deja claro que estos dos coches son como la noche y el día. El Chiron monta un motor 8.0 W16 con cuatro turbos que desarrolla 1.500 CV, una potencia suficiente como para mover 447 ejemplares del P8.
El modelo chino es en realidad un cuadriciclo ligero eléctrico (se puede conducir sin carné) y, como tal, presenta un apartado mecánico muy modesto. Su propulsor solo desarrolla 3,35 CV que, sin embargo, son suficientes para llevarle lentamente hasta su velocidad máxima por ley en China: 50 km/h. La marca apunta que, sin limitador, puede llegar hasta 65 km/h.
De alimentarlo se encarga una batería de 72 V que, al menos en teoría, le otorga una autonomía de 150 kilómetros.
Por último, el precio también sitúa a uno de otro a todo un mundo de distancia: el Shandong P8 cuesta, al cambio actual, menos de 5.000 euros. El Chiron, según la versión, puede costar hasta ocho millones de euros.
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