Muchos conductores sueñan con tener un coche único y personalizado, aunque antes de proceder con modificaciones, es fundamental detenerse a considerar las posibles consecuencias. Según los expertos en valoración de Cap Hpi (multinacional que proporciona datos de soporte de decisiones y soluciones de software para la valoración de coches), las alteraciones en un vehículo pueden afectar negativamente a su valor de reventa y limitar el número de compradores potenciales.
Las razones detrás de esta devaluación son diversas. Por un lado, las modificaciones no aprobadas por el fabricante pueden invalidar la garantía del vehículo, si todavía se encuentra bajo ese periodo, y afectar las condiciones del seguro. Además, muchos compradores prefieren coches en su estado original, ya que las modificaciones, especialmente las de carácter estético, suelen reducir el atractivo visual del automóvil.
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Las alteraciones en el motor también presentan desafíos. Incrementar la potencia o instalar piezas no originales puede generar dudas sobre la fiabilidad del vehículo y elevar los costos de mantenimiento. Estas modificaciones, en muchos casos, disminuyen la confianza de los compradores potenciales, afectando al valor de reventa.

Piezas no originales
Jeremy Yea, editor sénior de valoraciones de Cap Hpi, señala que el impacto de las modificaciones en el valor de un coche depende de factores como la calidad de la instalación, la reversibilidad de los cambios y su legalidad. Las modificaciones no aprobadas o ilegales pueden hacer que el vehículo acabe no siendo apto para circular, reduciendo considerablemente su valor de mercado.
Para evitar una devaluación significativa, se recomienda conservar las piezas originales, priorizar las mejoras de rendimiento por encima de los cambios estéticos y asegurarse de que las modificaciones sean realizadas por profesionales que utilicen piezas de calidad y homologadas. También es crucial considerar el impacto a largo plazo en el seguro y la integridad del vehículo.

Legislación e ITV
Aunque ciertas modificaciones pueden aumentar ligeramente el valor de un coche para un comprador muy específico, en la mayoría de los casos, las alteraciones tienden a disminuir el valor de reventa y a limitar el mercado de compradores potenciales. Por ello, antes de realizar cualquier modificación, resulta esencial evaluar cuidadosamente los pros y los contras.
Así, las modificaciones de vehículos en España están estrictamente reguladas por la Dirección General de Tráfico (DGT) e implican pasar una inspección técnica en la ITV. Cualquier cambio que afecte a la seguridad, emisiones o características técnicas del coche debe ser autorizado y registrado. Además, incumplir esta normativa puede acarrear sanciones económicas, e incluso, la inmovilización del vehículo.
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