Ducati tiene muchos modelos icónicos, pero uno de los más reconocibles es la Monster, una naked que atrae tanto por su concepto como por su estética y su sonido. Ahora, la marca italiana se lo pone más fácil a aquellos que quieran entrar en la familia gracias a una nueva variante de acceso, la Ducati Monster 797.
Hecha a imagen y semejanza de sus hermanas mayores, presenta unas dimensiones más compactas que la deberían hacer manejable incluso para un público más amplio. Tiene una distancia entre ruedas de 1.435 milímetros, mientras que el asiento se eleva a 805 mm del suelo y el peso del conjunto se sitúa en los 193 kilos.
De animarla se encarga un motor Demodue L-Twin de 803cc refrigerado por aire (como en la Ducati Scrambler), que entrega 75 CV a 8.250 rpm y 69 Nm de par máximo a 5.750 vueltas. Se combina con una caja de cambios manual de seis marchas, pero no se sabe nada de sus prestaciones, aunque sí de su consumo. La marca homologa un gasto de 5,3 litros a los 100 kilómetros, que combinado con un depósito con 16,5 litros otorga una autonomía de unos 300 kilómetros.
En la rueda delantera cuenta con una horquilla Kayaba de 43 milímetros no ajustable y en la trasera monta un monoamortiguador Sachs regulable en precarga y rebote. Los frenos los firma Brembo, con dos discos de 320 mm delante mordidos por pinzas de cuatro pistones y uno solo de 245 mm detrás. La Ducati Monster 797 tiene ABS de serie, pero esta es toda la ayuda con la que cuenta, dejando de lado el control de tracción o los selectores de modo de conducción propios de modelos superiores.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.