Anda cerca del mejor y cuesta casi la mitad. Con esta fórmula, Sym quiere revolucionar el segmento de los escúteres grandes de media cilindrada. Y su propuesta, el nuevo Maxsym TL 500, reúne argumentos para conseguirlo. Para empezar, ofrece un diseño moderno y vistoso, buena calidad general, un motor bicilíndrico de 465cc y unas prestaciones y comportamiento muy logrados y casi de tintes deportivos.
Además, suma cinco años de garantía, matriculación sin coste y seguro a terceros incluido durante el primer año, que, si el comprador tiene más de 21 años, puede convertir en todo riesgo por 50 euros extra. Y cuesta 7.499 euros, solo un poco más de la mitad que la Yamaha TMax 560, el líder del mercado (desde 12.499 euros) en este tipo de modelos.
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BMW, Honda, Kymco, Suzuki y Yamaha forman el elitista grupo de fabricantes que comercializan escúteres con motor bicilíndrico, a los que se suma ahora Sym. Y, aunque el Maxsym TL 500 no es un producto tan sofisticado como la TMax ni algunos de sus rivales, ofrece mucho para lo que cuesta y tiene una relación entre calidad y precio casi imbatible.
La contrapartida a su mejor precio se reduce al acabado, más sencillo que el de otros modelos, aunque satisfactorio, y al equipamiento, que carece de algunos elementos de gama alta sí presentes en la competencia como la llave electrónica, los mapas de potencia o la comunicación con el móvil. Pero su mecánica reúne tecnología punta y su comportamiento lo atestigua.
El motor de la Maxsym cubica 465cc y rinde 41 CV a 6.750 rpm. Se ha buscado sobre todo una respuesta suave, con buen empuje a medio régimen y una estirada final notable, aunque se acaba algo pronto. Pero es justo a bajo y medio régimen donde más se utiliza este tipo de vehículos y ahí cumple con nota. Sale desde parado con una aceleración vigorosa, ofrece un empuje constante y de cierta contundencia entre 3.500 y 6.200 revoluciones, y a 120 km/h sostenidos circula tranquilamente a 4.000 vueltas, quedando todavía una amplia reserva de potencia.
Instrumentación digital.
Aparte del motor, también convence el equilibrio general, porque el bastidor, las suspensiones y los frenos funcionan de maravilla. En ciudad, a pesar de no ser un escúter muy ligero (pesa 223 kilos), se desenvuelve bien y resulta ágil y manejable. En autopista presenta un rodar suave, con buena protección y pisada firme. Y en tramos revirados o carreteras con curvas sorprende por su eficacia. Solo la suspensión trasera, algo dura, podría ser uno de los pocos peros.
En cuanto a su equipamiento, toda la iluminación es por LED, la pantalla del parabrisas se puede regular en altura en dos posiciones, la instrumentación digital incluye varias configuraciones y al extender la pata de cabra se conecta el freno de estacionamiento. Además, dispone de apertura remota para el tapón de gasolina y toma USB, y en el hueco bajo el asiento caben un casco integral o dos jets.
En definitiva, Sym ha hecho un gran trabajo con este Maxsym 500 TL, ha construido un conjunto dinámicamente eficaz y equilibrado, tal vez menos lujoso y exclusivo que sus competidores, pero con un precio de auténtica ganga que lo convierte en uno de los modelos de su tamaño y cilindrada más accesibles.
Hueco bajo el asiento.
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