El Chevrolet Camaro 2020 es la muestra de que, en ocasiones, los fabricantes de automóviles escuchan a sus seguidores y actúan en consecuencia. El popular muscle car recibió una actualización hace un año en la que presentaba un frontal con una configuración que no terminó de gustar a los incondicionales del modelo, que no dudaron en criticarlo con energía.
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La marca respondió solo unos meses después anticipando los cambios con el prototipo SS Shock y, ahora, estos se han trasladado al modelo de producción. Las modificaciones más señaladas son dos: la barra que divide la parrilla pasa a ser del color de la carrocería y el logo con la reconocible pajarita se sitúa en la parte superior.
Además, se suma un color inédito a las opciones disponibles para el exterior, el Rally Green, junto a diversos elementos que están disponibles en función del nivel de acabado escogido: alerones, llantas de hasta 20 pulgadas, grupos ópticos oscurecidos, pedales de aluminio, pinzas de freno naranjas o rojas, volante y palanca de cambios en ante…
La gama se amplía con la llegada del nuevo Camaro LT1, que se convierte en la versión más asequible con motor V8 del modelo. Entrega 455 CV y puede combinarse tanto con una caja de cambios manual de seis velocidades como con una automática de diez. Se distingue por el capó específico, las llantas de 20 pulgadas y los logos en negro.
Además, los motores V6 ahora pueden asociarse a una transmisión automática de diez relaciones, derivada de la que emplean los V8, pero con unos ajustes especiales acordes a la potencia del propulsor.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.