La manera de controlar el coche ha cambiado mucho en los últimos años. No el vehículo en sí, que por el momento sigue utilizando volante y pedales, si no todo lo que está al alcance del conductor: radio, climatizador, modos de conducción, etc. Lo que en principio eran botones se convirtieron en superficies táctiles e incluso en comandos de voz, pero ningún formato ha sido más particular que el que acaba de presentar Volkswagen.
En la oficina de patentes alemana ha aparecido recientemente un registro con un sistema nunca se había visto: combina la visión con el empleo de un único botón.
Más información
Volkswagen ha sido criticada en la última década por el paso de los controles físicos de sus coches a superficies hápticas. Éstas no eran tan precisas como aquellos, así que los usuarios se quejaron y, recientemente, el fabricante ha vuelto a incluir botonería analógica en sus modelos más recientes.
Sin embargo, con este nuevo sistema quiere ir más allá. En la descripción de la patente se puede leer: “Por lo general, un mayor número de funciones/opciones de configuración conlleva una estructura de menú más compleja (tecla programable) o una multiplicación de los elementos de control (tecla fija). El usuario se distrae cada vez más del tráfico durante la operación”.

Para solucionarlo, la firma propone algo hasta nunca visto: un único control, en forma de botón o palanca, situado en el volante y con el que se controla todo el sistema. La propuesta es original, pero, sobre todo, genera dudas, puesto que, ¿cómo va a un único elemento a permitir navegar entre todas las opciones que ofrece un automóvil moderno?
Seguimiento ocular
Ahí entra la parte más peculiar de la propuesta. El coche dispondría de una cámara que seguiría el movimiento de los ojos del conductor. De esta manera, cuando se fije en algo, por ejemplo, el climatizador, interpreta que eso es lo que quiere controlar, así que el interruptor serviría para subir o bajar la temperatura; si la mirada se posase en la radio, haría lo propio con el volumen o para cambiar de emisora, etc.
No se puede negar la originalidad, pero es cierto que plantea problemas considerables. Para empezar, si el objetivo es evitar distracciones, que el conductor tenga que mirar fijamente al sistema con el que tiene que interactuar, parece contraproducente. Además, tendría que ser todo muy preciso para que no hubiera errores en elementos que estén muy pegados o tengan múltiples funciones. Por ejemplo, si se mira al parabrisas, ¿es que se quiere activar los limpiaparabrisas o que se quiere activar la función calefactable?
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram
Pocos adivinarían qué es este artefacto, pero lo cierto es que es tremendamente útil para el coche y te sacará de apuros
El nuevo Volkswagen T-Roc desvela sus precios con la intención de seguir siendo un superventas