Aunque la mayoría de los fabricantes trabaja en conducción autónoma para crear modelos propios y personales, muchos de ellos son conscientes de que esta tecnología tiene una aplicación interesante y con mucho futuro para la creación de flotas que circulen por la ciudad haciendo las funciones de taxi-coche compartido. La última propuesta de Mercedes a este respecto es Mercedes Vision Urbanetic. Se trata de un vehículo autónomo de diseño bastante peculiar, algo que obedece a que se trata de un prototipo y debe llamar la atención, pero cuyo principal punto fuerte es la modularidad y versatilidad.
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La base del vehículo, que incluye el chasis, el sistema de propulsión y ambos ejes, mide 5.140 milímetros de largo, pero se puede combinar con diversas partes superiores en función de cuál deba ser su tarea a desempeñar. Así, la llamativa forma de cúpula de las imágenes está pensada para transportar a pasajeros, que pueden ser hasta 12 simultáneos; mientras que hay otra con forma de contenedor, bastante más alta, pensada para mover mercancías, con 3.700 mm de longitud y 10 metros cúbicos de capacidad.
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Estarían totalmente conectados a la red, por lo que el Mercedes Vision Urbanetic sería capaz ya no solo de reaccionar a las necesidades de la ciudad, sino también de anticiparse a las mismas. Por ejemplo, si detecta que en determinada zona hay una concentración alta de clientes, enviaría unidades en previsión de un aumento de la demanda del servicio.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.