El derrape es una técnica que lleva utilizándose desde siempre en el mundo del motor, ya sea para dar exhibiciones o para competir. Es una manobra bastante llamativa, pero que está reservada casi en exclusiva a los coches de tracción trasera. Sin embargo, hay un truco para llevarlo a cabo con modelos de tracción delantera, aunque entraña cierto peligro: usar bandejas de McDonald’s.
En realidad valdría con cualquier superficie plana de plástico, pero lo fácil que es hacerse con las bandejas de la cadena de comida rápida, sumado a la forma que tienen, hace que sea una opción muy utilizada para llevar a cabo una maniobra de la que hay bastantes ejemplos en internet.
El concepto base es utilizarlas en las ruedas del eje que no es motriz, para que el vehículo deslice en esa zona y así llevar a cabo derrapes de manera sencilla.
Para hacerlo basta con colocar las bandejas en el suelo, justo detrás de las ruedas traseras, y, manteniéndolas en su sitio fijas, poner la marcha atrás hasta que los neumáticos estén sobre ellas. De esta manera pierden el contacto con el asfalto y no hay agarre.
Lo siguiente es poner el freno de mano para que las ruedas se queden ancladas y arrastren con ellas las bandejas al ponerse en marcha. Así, el eje delantero, que está liberado, empieza a mover el coche y basta con alcanzar cierta velocidad y girar la dirección para que el eje trasero se descoloque y deslice sobre el asfalto.
Los problemas de derrapar utilizando las bandejas del McDonald’s
Además de que es una práctica sancionable si se lleva a cabo en carretera abierta, utilizar este método para hacer ‘drift’ puede ser problemático por varios motivos.
Para empezar, este tipo de bandejas, aunque parezcan duras, no están pensadas para aguantar el peso de un coche, por lo que con muy poco uso se desgatarán y derretirán. Si esto ocurre y el neumático hace contacto con el suelo, debido a que está puesto el freno de mano el coche se puede ‘clavar’ y es posible que provoque alguna avería en el sistema de transmisión.
También existe la posibilidad de que las bandejas salten de las ruedas y que causen algún tipo de daño, por ejemplo, en el paragolpes trasero.
Por último, es una práctica en la que se pierde por completo el control del eje trasero, lo que puede significar que el coche se salga de la carretera y que ocurra un accidente.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.