Toyota se sacude el conservadurismo con el nuevo C-HR

La marca japonesa entra en la liga de los modelos arriesgados y propone un SUV compacto muy llamativo

toyota c-hr
Toyota C-HR: mecánica híbrida y diseño arriesgado.

Toyota no es una marca dada a concebir diseños arriesgados para sus vehículos, más bien al contrario, y lo confirma con unos mensajes de comunicación que tienden a resaltar ciertos aspectos técnicos, como la eficiencia y la fiabilidad, mucho antes que los estéticos. Pero con el nuevo Toyota C-HR la firma japonesa parece haber hecho caso por fin de los estudios de mercado, esos que señalan al diseño como una de las principales motivaciones de compra de un automóvil, y presenta un SUV de tamaño compacto que sobresale por su personalidad.

Ya está a la venta a partir de 24.250 euros (con todos los descuentos incluidos), unas tarifas superiores a la media que tratan de reforzar su planteamiento especial, aunque se asocian también a un completo equipo de serie.

Y es que el nuevo Toyota C-HR no es solo fachada, porque aparte de su imagen, aporta también un interior más cuidado que el de la mayoría de modelos de la casa y completa sus atributos de vehículo singular adoptando la mecánica híbrida del Prius, que es la única disponible. Incluso se aprecia una evolución en cuanto a conducción, porque ofrece un comportamiento dinámico, por ejemplo, claramente superior al del RAV4.

Con una fisonomía de cupé deportivo con suspensiones elevadas, ángulos cubistas y detalles de diseño como los tiradores de las puertas traseras, que van camuflados, el nuevo Toyota C-HR ofrece la personalidad suficiente como para no ser uno más entre la ingente oferta de modelos similares.

Y es que los SUV compactos siguen siendo los coches de moda, los que más crecen: en solo cinco años, de 2010 a 2015, han doblado su presencia en las calles y carreteras españolas y del resto de Europa. Las previsiones, además, señalan que la tendencia continuará creciendo en los próximos años.

Su longitud, de 4,36 metros, lo empareja con alternativas similares como los Nissan Qashqai y Fiat 500X, a las que supera en impacto visual pero que le superan en funcionalidad interior. Y es que, aunque el Toyota C-HR ofrece espacio suficiente para los adultos delante y detrás, la caída del techo y la reducida superficie de las ventanillas posteriores pueden crear sensación de agobio al viajar en los asientos traseros.

El maletero, por su parte, es más pequeño que grande, porque sus 377 litros le sitúan cerca del 500X (350) pero lejos del Qashqai (430).

Toda la base mecánica procede del Prius, el icono ecológico de Toyota. Aunque el chasis presenta menor batalla o distancia entre los ejes, y una mayor anchura de vías, para ofrecer una conducción más ágil, un aspecto que consigue.

Transmite sensaciones de turismo y, a modo comparativo, balancea menos y entra mejor en las curvas que su hermano mayor el RAV4, que por su parte parece más torpe y pesado y obliga a girar más el volante para que el coche se inscriba en los virajes.

El motor y la transmisión (delantera; no hay opción de 4×4), en cambio, son los mismos del Prius y muestran las mismas ventajas e inconvenientes. Rinde 122 CV y desarrolla prestaciones suficientes para casi cualquier uso. Rodando por ciudad y autopista a velocidad constante, el silencio y la suavidad son las notas predominantes y el C-HR se revela como un coche cómodo.

toyota c-hr

Sin embargo, en situaciones que requieran cambios de ritmo, como carreteras secundarias, pendientes o adelantamientos, se puede echar en falta algo más de empuje y sobre todo una transmisión más eficaz, porque el cambio que lleva resulta similar al CVT de los escúteres y, al acelerar con decisión, provoca un aumento importante de la sonoridad que reduce el agrado al volante.

Los consumos oficiales son mínimos, de 3,6 a 3,9 litros de media en función del tamaño de las llantas, pero, como sucede con la mayoría de híbridos, solo será posible aproximarse a este registro circulando por ciudad y aplicando una conducción especialmente eficiente.

Al salir a carretera y autopista, pierden su ventaja comparativa frente a los diésel y, en un viaje, lo normal es que se gaste más. Con este C-HR el consumo real puede rondar los 5,5 litros con un uso tranquilo y superar los siete al elevar las exigencias a la mecánica.

Todas las versiones vienen de serie bien dotadas, con 7 airbags, control de estabilidad, ordenador de viaje, climatizador dual, llantas de aleación de 17 pulgadas, bluetooth, USB, botón de arranque y llave manos libres, sensor de lluvia y luces, pantalla táctil, cámara trasera de ayuda al estacionamiento y el paquete de seguridad electrónica Safety Sense, que reúne reconocimiento de señales de tráfico, regulador de velocidad inteligente ACC, alerta de salida del carril, luces largas automáticas y control de la distancia de seguridad con frenado autónomo de emergencia e identificación de peatones.

Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram

Newsletter ElMotor

Recibe la newsletter de EL MOTOR con toda la actualidad del mundo del automóvil y la moto, tecnología, seguridad, conducción y eficiencia.

Apúntate

Servicios ELMOTOR

Encuentra los mejores talleres, seguros, autoescuelas, neumáticos…

BUSCAR
Cerrar

NEWSLETTER

Toda la actualidad del mundo del automóvil y la moto, tecnología, seguridad, conducción y eficiencia en tu buzón de correo.

¡Me interesa!
Por ahora no