Hennessey radicaliza aún más el Venom F5 con la versión Revolution Coupe

El Hennessey Venom F5 es uno de los coches más rápidos del mundo, y su objetivo es alcanzar los 500 km/h. La compañía sigue embarcada en dicho proyecto, pero, de manera paralela, ha concebido una variante más apropiada para ir a fondo en circuito (aunque también está homologada para calle). Se trata del Hennessey Venom F5 Revolution Coupe.

Sigue la estela exclusiva de sus hermanos y su producción estará limitada a solo 24 unidades, algunas de las cuales ya tienen dueño. Su precio es de 2,5 millones de euros.

A simple vista, puede costar encontrar las diferencias respecto al Venom F5 estándar (respecto al Venom F5 Roadster los cambios son más obvios), pero están ahí y se centran en la aerodinámica.

Se ha añadido un nuevo splitter delantero y el flujo del aire se canaliza de manera diferente. Además, tiene una toma de admisión en el techo, cuenta con un nuevo difusor y, sobre todo, se ha instalado un gran alerón trasero hecho de fibra de carbono y que puede regular su ángulo de inclinación.

Todo ello hace que sea capaz de generar una gran cantidad de carga aerodinámica. Circulando a 300 km/h, son 362 kilos; a 400 km/h la cifra asciende hasta los 635 kilos, lo que hace que el hiperdeportivo se pegue al asfalto.

Por este nuevo enfoque, lo lógico es que sus prestaciones sean inferiores a las del modelo convencional (0-100 km/h en menos de tres segundos), pero Hennessey no ha facilitado los datos.

La compañía sí ha señalado que se ha puesto especial énfasis en aligerarlo en la medida de lo posible, consiguiendo que sea el más liviano del trío con un peso inferior a 1.361 kilos.

Su motor sigue siendo el bloque 6.6 V8 biturbo apodado ‘Fury’, que desarrolla una potencia de 1.842 CV y un par máximo de 1.617 Nm. Se encargan de gestionarlos una transmisión automática y un sistema de tracción trasera. Para detener tanta artillería, monta de serie un sistema de frenos carbocerámicos mordidos por pinzas multipistón.