Lancia ha resucitado. Tras su desaparición de la mayoría de los mercados, la marca italiana se ha reinventado a si misma e inicia una nueva era cuyo primer fruto es el Lancia Pu+Ra HPE. El prototipo, más que el adelanto de un modelo de producción, es una declaración de intenciones de los planes de la compañía para los próximos 10 años.
Desde el primer vistazo queda claro que la marca ha combinado rasgos característicos de sus modelos míticos con elementos que van a integrar el lenguaje de diseño de sus nuevos coches.
Es fácil apreciar el aire que se da este prototipo al Lancia Stratos, sobre todo por detalles como los faros traseros redondos; pero el diseño es mucho más moderno y futurista. La estrella de tres puntas, que tiene una presencia importante, parece que va a ser clave en la nueva identidad visual de Lancia, dando forma a la firma lumínica del frontal, a los pilotos secundarios y a las llantas.
Mención especial merece el techo circular acristalado, que permite la entrada de mucha luz a un interior minimalista, con cuatro plazas, una consola de control para cada fila de asientos y un salpicadero que forma una suerte de mesa redonda.
Para dar forma al habitáculo la marca ha tomado su inspiración de la decoración y muebles propios de una casa, buscando una “arquitectura fluida con gran atención al detalle en una composición global de formas puras”.
Un componente clave es S.A.L.A., una “interfaz virtual mínima e inteligente, que reúne las funciones de audio, climatización e iluminación”. Así, conductor y pasajeros pueden ajustar el ambiente interior del automóvil simplemente tocando un botón o hablando con el vehículo.
Los detalles técnicos del prototipo son escasos, señalando únicamente que el ‘HPE’ del nombre hace referencia a ‘Eléctrico del Alto Rendimiento’ y que su autonomía es de unos 700 kilómetros.
La hoja de ruta de Lancia
La apuesta por la electrificación es total en el caso de Lancia, que ya ha establecido la hoja de ruta con sus próximos lanzamientos.
En 2024 se presentará el nuevo Lancia Ypsilon, que estará disponible tanto con mecánica híbrida como con eléctrica. A partir de 2026 todos los nuevos modelos que lance serán de cero emisiones y para 2028, momento en que verá la luz el nuevo Lancia Delta, ya solo habrá coches eléctricos en la gama de la compañía.
El fabricante no ha concretado cuáles serán el resto de modelos que va a lanzar, pero sí ha confirmado que pertenecerán a los tres segmentos que tradicionalmente ha trabajado: coches urbanos, sedanes compactos y vehículos de representación.
Es esta última categoría la que deja la puerta abierta a deportivos de alto rendimiento, aunque en un primer momento no se ha anunciado que el Lancia Pu+Ra HPE vaya a llegar a producción.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram