El truco para eliminar rápidamente los ruidos del coche

Con el paso del tiempo, los automóviles van adoptando holguras y desajustes entre muchas de sus piezas que acaban generando unos molestos ruidos durante la conducción. La mayoría de las veces son sonidos localizados en una zona concreta.

Así, los más comunes se presentan en los plásticos. Este material es muy dado a producir crujidos con el paso de los kilómetros. Los cables que se esconden en el salpicadero son otros de los causantes de los molestos sonidos, ya que con la edad acaban rozando contra otras piezas.

Aunque la palma se la llevan las puertas, los frenos y los amortiguadores. Se suele decir que los desagradables ruidos que emiten los coches se deben a la falta de mantenimiento, aunque el mayor culpable es el paso del tiempo. Para acabar con estos molestos chirridos, siempre y cuando no provengan del motor y de otras zonas críticas, solo se necesita un producto.

Espray de silicona

Se trata de un producto lubricante y antiadherente que es capaz de conservar y proteger plásticos, goma, metal y madera. Además, evita que se adhieran otras partículas a las zonas donde ha sido usado. 

La mayor ventaja del espray de silicona es que aísla plásticos y cauchos, que son los mayores responsables de los ruidos de los coches. Está especialmente indicado para proteger las piezas de goma o plástico prolongando su vida, evitando que se agrieten, se adhieran o se congelen (gomas de puertas, topes, parachoques, tubos de refrigeración, neumáticos, rejillas, etc.). Además, no mancha y tampoco deja rastro ni olor.

¿Dónde se puede utilizar?

Los espráis de silicona se pueden encontrar en grandes superficies, tiendas del sector del automóvil o en las tiendas de comercio electrónico. Su precio va desde los 5 a los 15 euros dependiendo de las propiedades y del fabricante. 

Las principales piezas y zonas del coche donde se puede utilizar para eliminar los ruidos son:

• Limpiaparabrisas
• Cuna de los asientos
• Gomas de las puertas
• Ventanas
• Cinturón de seguridad
• Cerraduras de las puertas
• Bisagras y pestillos
• Paneles interiores
• Piezas del salpicadero

Tras la utilización, se consigue una lubricación extra que ayuda a eliminar la mayoría de los ruidos molestos que se producen en el interior del habitáculo en cuestión de minutos. Es importante que se lean previamente las advertencias del fabricante sobre la forma de empleo y las superficies.