Agentes de la Policía Foral de Navarra en la patrulla de Alsasua, Lecumberri, fueron testigos de una escena que rápidamente despertó sus sospechas: un conductor estaba realizando una maniobra de aparcamiento de forma errática, impactando varias veces contra una pared. Lo insólito del suceso se vio agravado al comprobar que el vehículo, un turismo, circulaba además con el maletero abierto. Tras acercarse para comprobar la situación, la sorpresa de los policías fue mayúscula al identificar al conductor.
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Se trataba de un hombre de 90 años que, además de presentar problemas de coordinación al volante, tenía su carnet de conducir caducado desde 1993. Esto significa que el nonagenario llevaba la friolera de 32 años circulando sin el permiso en vigor. La infracción, considerada grave por la DGT, implica una multa de 200 euros. Sin embargo, el riesgo real reside en que la compañía de seguros podría negarse a cubrir cualquier daño personal o material en caso de accidente, una complicación de calado para el conductor.

Conductores mayores
El llamativo caso de Navarra trae de vuelta un debate cíclico y crucial para la seguridad vial en España y en el resto de países de la Unión Europea: la aptitud de los conductores senior. Este colectivo, compuesto por personas de 65 años o más, representa actualmente el 16,5% del total de conductores españoles, pero lamentablemente está implicado en el 26% de los fallecidos en accidentes de tráfico, según datos oficiales, lo que habla a las claras del problema.

Pérdida de facultades
La realidad es que, a medida que se cumplen años, se produce una pérdida progresiva de facultades esenciales para una conducción segura, como la capacidad de reacción o los reflejos, algo que los datos de siniestralidad confirman. Por ello, y en el contexto de seguridad, las autoridades han puesto en el punto de mira las renovaciones del carnet de conducir para este grupo de edad. El director de la DGT, Pere Navarro, ya se ha referido a las posibles limitaciones futuras, buscando garantizar que quienes conduzcan lo hagan siempre en las condiciones de seguridad adecuadas, sin importar la edad.
La importancia del psicotécnico
El incidente en Alsasua subraya la importancia de los Centros de Reconocimiento de Conductores autorizados, los únicos lugares donde se puede renovar el permiso, ya que se someten a los conductores a pruebas psicotécnicas para comprobar sus facultades físicas. Es una medida clave para prevenir situaciones como la vivida en Navarra, donde la falta de renovación se prolongó durante más de tres décadas.
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