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70 Aniversario.
Bristol Cars se fundó hace 70 años como marca dedicada a crear vehículos deportivos de lujo. Pasó por una mala época, hace cinco años fue rescatada de la bancarrota y este es su primer modelo producido en casi una década. -
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Corte clásico.
Salta a la vista la inspiración 'vintage' de su estética, dando forma a un descapotable biplaza de suaves líneas, superficies limpias y unos grupos ópticos circulares de estilo retro. -
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Tecnología moderna.
La carrocería está fabricada en fibra de carbono. Esto ayuda a que el peso sea bastante contenido (solo 1.100 kilos), a pesar de que mide 4,20 metros de largo. -
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Motor BMW.
Bajo el capó oculta un bloque 4.8 V8 perteneciente a la firma alemana, aunque perfeccionado por Bristol Cars. Desarrolla una potencia de 370 CV y 490 Nm de par máximo. -
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Prestaciones.
A pesar de no tener una potencia estratosférica, sus caballos combinados con su ligero peso le permiten acelerar de 0 a 100 en 3,8 segundos, además de alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h (limitada electrónicamente). -
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Calidad británica.
El habitáculo es minimalista, pero presenta todo lujo de detalles: la tapicería es de cuero marrón, el salpicadero y el cuadro de instrumentos están acabados en negro lacado y multitud de elementos están fabricados en aluminio. -
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Presentación oficial.
Está previsto que su puesta de largo se produzca el próximo 1 de septiembre en el Salón Prive. -
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Exclusivo.
Las primeras informaciones apuntan a una producción limitada de solo 70 unidades. El precio se desconoce, pero los rumores hablan de una cifra superior a los 300.000 euros. -
Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.
