Max Verstappen es una de las superestrellas de la Fórmula 1, algo lógico si se tiene en cuenta que ha ganado los tres últimos campeonatos: 2021, 2022 y 2023. Sin embargo, el piloto también está adquiriendo relevancia fuera de la pista y de cuando en cuando lleva a cabo campañas publicitarias.
Una de las que más atención han despertado es la Heineken, titulada ‘The Best Driver’, es decir, ‘El mejor conductor’. En ella, la marca busca concienciar a la audiencia de quién es, en realidad el mejor conductor siempre.
Un grupo de amigos se reúnen en un bar de manera recurrente y, estando Verstappen entre ellos, es él, por motivos obvios, el que siempre tiene que conducir de vuelta, ya que es el mejor disponible.
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Esto tiene dos consecuencias. La primera es que no puede beber, puesto que al volante hay que ser responsable. La segunda, que su querido coche se queda siempre aparcado en la acera, pues a él le toca llevar los vehículos de sus amigos, que no es que precisamente sean bólidos espectaculares.
El primero es un Ford S-Max, un monovolumen para que vaya toda la pandilla sin apretura alguna. El segundo también es un Ford, aunque en esta ocasión se trata de un pequeño Ka (el original, no la segunda generación que se lanzó años más tarde al mercado), en el que van un poco justos de espacio.
Cansado de tener que ser el conductor siempre, opta por tomarse una cerveza, lo que le libra de la tarea. Sin embargo, cuando está mirando al resto desde el interior del bar, les muestra que es una cerveza sin alcohol, por lo que puede ir a coger su querido coche. Pero, ¿cuál es?
El coche que conduce Verstappen en el anuncio
La cervecera debe de tener algún acuerdo con la marca estadounidense, porque Max se pone a los mandos de un Ford Mustang. Eso sí, no se trata de la actual generación, si no de la previa.
Aunque no se pueda ver muy bien, detalles como los vinilos que adornan los laterales y el diseño de las llantas apunta a que se trata del Mustang Mach 1, tope de gama para Europa de la entrega anterior del muscle car y que, de hecho, es incluso más potente que la versión superior de la actual, el Mustang Dark Horse.
Monta un motor 5.0 V8 que desarrolla 460 CV y 529 Nm de par máximo, lo que le permite acelerar en 4,4 segundos de 0 a 100 km/h, así como alcanzar 267 km/h de velocidad punta.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.