El Citroën C3 Aircross ha demostrado ser, desde su aparición hace dos años, una auténtica navaja suiza que sirve tanto para el día a día en la ciudad como para escapadas de ocio en familia. Con un interior bien aprovechado (maletero de 410 litros modulable gracias a la banqueta trasera deslizante en dos partes) y grandes posibilidades en cuanto a personalización estética (hasta 85 combinaciones posibles) o de equipamiento, se postula como uno de los modelos más interesantes en el segmento que en los últimos tiempos más ha aumentado su demanda (Hyundai Kona, Kia Niro, Peugeot 2008, Renault Captur, Seat Arona…).
Ahora, el SUV compacto de Citroën mira más lejos, aumentando sus posibilidades en carretera con la mecánica de tres cilindros 1.2 PureTech de 130 CV, que le aporta mejores prestaciones que las versiones existentes anteriormente (110 CV en gasolina o 100 y 120 CV en diésel). Pero el nuevo motor no dispara el consumo ya que homologa una media de 5 litros según la nueva normativa WLTP.
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Fabricado en España
La nueva versión marca el tope de la gama C3 Aircross y también adopta la caja de cambios automática de seis velocidades EAT6, a la que hasta el momento solo podía optar la versión diésel BlueHDi de 120 CV. Entre otras ventajas, como facilitar una conducción más cómoda y hacer al Citroën C3 Aircross más eficaz sobre terrenos deslizantes, la caja de cambios automática permite aprovechar todo el potencial del nuevo motor gracias a su modo de conducción Sport. Aunque en la práctica, y sobre todo en carreteras de montaña, se echan en falta unas levas que permitan reducir de marcha sin necesidad de soltar el volante.
El Citroën C3 Aircross es un modelo que se produce exclusivamente en la factoría Opel de Figueruelas (Zaragoza). La nueva versión de 130 CV se comercializa desde 22.600 euros con los descuentos promocionales aplicados y en acabado Shine, que ofrece un elevado equipamiento de serie. Incluye entre otros el sistema de parada automática Start&Stop, la frenada automática de emergencia y el navegador en 3D. De forma opcional se puede acceder a la tecnología Grip Control (que adapta la adherencia en condiciones especiales, como la nieve, el barro o la arena) e incorporar el asistente para bajadas pronunciadas Hill Assist Descent.
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