Si lo miras por delante parece solo un Corvette C7 algo ensanchado pero una mirada a la zaga deja claro que estamos ante algo ‘gordo’ desarrollado para hacer carreras de drag: barra anticaballito, ruedas anchísimas, dos paracaídas para la frenada… todo ello necesario para controlar y frenar a esta criatura que entrega 3.500 CV de potencia.
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